De las raíces a la innovación: un viaje de resiliencia y emprendimiento

De las raíces a la innovación: un viaje de resiliencia y emprendimiento

Este articulo de la Letícia Nicaretta Pires consultora Capitalista Consciente Certificada por CBJourney - Conscious Business Journey

Desde nuestras raíces hasta nuestro futuro, una infancia bien vivida da forma a quiénes somos.

Vengo de una familia de origen humilde, que luchó mucho para mantener a su familia. Tanto mi padre como mi madre son de una familia de nueve hermanos. Pero destaco la determinación de mi familia materna. Mi abuelo falleció a los 42 años dejando nueve hijos, mi madre más joven tenía 2 años. Mi abuela crió sola a todos sus hijos, vivía en el campo, plantaba y cosechaba sus propios alimentos para sustentar a toda la familia. No dejaron de estudiar para ayudar en la casa. Empiezo contando esta historia porque mi abuela fue una fuente de inspiración. Fue una auténtica guerrera, crió a todos sus hijos en medio de dificultades.

Este viaje fue mi mayor inspiración. Crecí viendo a mis padres construir todo con mucho esfuerzo, criándonos a mí y a mi hermano menor con valores sólidos. Desde pequeña siempre me ha gustado estudiar. Soñaba con aprender palabras, leer y dominar las tablas de multiplicar. La alegría de aprender a leer transformó mi vida; Los libros se han convertido en mis grandes compañeros. Pasé por todos los géneros literarios, desde infantil hasta liderazgo y desarrollo personal.

Con el paso de los años he notado mi facilidad con el razonamiento lógico. Siempre me ha ido muy bien en matemáticas. En esa presión al terminar la secundaria, por elegir una profesión, entré a la ingeniería. Tomé la decisión correcta y amo mi profesión, pero en el camino mientras estudiaba la carrera, tuve la oportunidad de trabajar en una agencia de publicidad. Como persona que lee mucho, es planificadora, creativa y organizada, me encontré en la profesión. Me encantó organizar cada etapa del evento, desde el protocolo, los contratos, la publicidad hasta la ejecución.

Con la llegada de la pandemia vi a mi ciudad, de poco más de seis mil habitantes, enfrentar desafíos en el sector comercial. Las pequeñas empresas necesitaban digitalizarse, pero muchas no sabían cómo. Fue entonces que creé tarjetas de presentación digitales, que conectaban a las empresas con sus clientes y allanaban el camino para estrategias más completas en las redes sociales. Así nació mi agencia de marketing, con el propósito de apoyar a emprendedores locales.

En enero de 2021 recibí mi diploma de Ingeniería Civil. Quería trabajar en mi profesión de formación y junto con un amigo creamos Azimute – Arquitetura, Engenharia e Urbanismo. Nos dimos cuenta de que nuestra ciudad necesitaba de nosotros, jóvenes emprendedores y con sed de conocimiento, para buscar nuevas herramientas que facilitaran el trabajo de cada sector involucrado. Hoy contamos con nuestra cartera de clientes y buscamos identificar las necesidades individuales de cada proyecto, atendiendo al perfil de cada uno, con énfasis en la accesibilidad y la sustentabilidad, buscando soluciones técnicas y arquitectónicas con conceptos modernos, innovadores y con identidad propia, ofreciendo ambientes adecuados para cada perfil. Aún tenemos mucho por hacer en movilidad urbana, pero de casa en casa vamos creando este concepto necesario.

En cuanto a mi agencia de marketing, sigue creciendo y aportando a negocios de las áreas de construcción, derecho, odontología, hotelería, entre otras. Y además de atender mi ciudad, hoy tengo clientes en todo Brasil.

Los libros siguen contribuyendo a mi desarrollo. Mucho de lo que necesito para seguir evolucionando está en ellos, en las personas que se cruzan en mi camino y en mis experiencias de viaje.

Para crear negocios más conscientes, debemos ser conscientes de nuestro propio espacio y comprender cómo podemos contribuir al lugar donde vivimos, para luego expandir estas soluciones.

Las generaciones de mi familia me enseñaron sobre el esfuerzo y el trabajo, sobre amar y respetar, tener ética y ser humilde. Eran empresarios de sus propias necesidades en la vida. Así sigo buscando cada día lo mejor de mí, para entregar lo mejor de mí a quien se cruce en mi camino.

En el libro Homo Deus, Yuval Noah Harari afirma:

"Hay tres tipos de recursos: materia prima, energía y conocimiento. Materia prima y energía, cuanto más usas, menos tienes. Conocimiento, cuanto más usas, más tienes".

Esta idea resume mi propósito como emprendedor. Quiero contribuir a un futuro más equilibrado y sostenible, aprovechando el conocimiento para crear soluciones innovadoras. Así como mi abuela fue emprendedora por necesidad propia, yo busco honrar ese legado, trabajando todos los días para entregar lo mejor de mí.

Creo que al conectarnos con nuestras raíces y comprender cómo podemos transformar el espacio que nos rodea, creamos negocios más conscientes e inspiramos a las generaciones futuras. Después de todo, el poder de elección está en nuestras manos y los cambios que deseamos comienzan con nosotros mismos.


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