DECISIONES FINANCIERAS: PLANIFICACIÓN FINANCIERA

Ha sido frecuente que muchas empresas se dejen llevar por el status quo y funcionen en automático debido la forma como han venido gestionando les funciono, por lo que preferían manejar la gestión de sus organizaciones basándose en datos históricos; fundamentando sus decisiones diciendo que lo que les resultado en el pasado también funcionara hoy. Empresas que viven el día a día y atienden los problemas de acuerdo a lo que consideraban urgente. 

Basados en esa forma de pensar y decidir en automático, el manejo de sus finanzas iba en la misma sintonía, sin dirección y planificación a mediano o largo plazo que le permitiera tener una salud financiera estable y sostenible; el manejo de las finanzas no era una actividad a la cual se le diera prioridad, su uso se limitaba a saber si generaban suficientes ventas para cubrir sus obligaciones, tener operaciones en cuentas bancarias y presentar informes cuando se los solicitaran, no cuando lo requerían.

Las empresas con conductas antes mencionadas son las que se han visto más afectadas en situaciones como la actual que exigen la toma de decisiones de forma rápida, ágil y oportuna; son organizaciones que no han sabido afrontar de forma eficiente las 0oportunidades que brindo los programas de reactivación económica, al no cumplir alguno o varios de los requisitos para participar de los programas porque no se ocuparon en generar un historial de crédito, crear relaciones de confianza con entidades del sistema financiero y sobre todo porque no gestionaron sus finanzas de manera proactiva.

Las situaciones de incertidumbres son difíciles de afrontar para cualquier empresa, más aun en el caso de empresas que no planifican como las que hemos descrito; pero que pueden hacer estas empresas para sobrellevar la situación de crisis y no desaparecer en el intento. Lo primero es comenzar a planificar y dejar de vivir el día a día, la frase “un día a la vez”, no aplica en este caso, a menos que se trate de una frase para motivar al equipo para alcanzar el objetivo.

La planificación financiera nos permitirá trabajar en una dirección en función a un objetivo y estrategia trazada, plantearnos alternativas de acción, establecer prioridades y responsabilidades, para poder tomar decisiones con fundamento. Planificar disminuirá las probabilidades de fracaso pero no evitara que podamos obtener resultados diferentes a los esperados, sean favorables o desfavorables. Entonces como beneficia a la organización tener un plan, sino podemos predecir lo que pasara en entornos de incertidumbre como sucedió con el covid-19 que nadie había incluido en su análisis de entorno para sus proyecciones del business plan 2020.

El tener un plan, nos da una ventaja, frente a no tener plan que sirva de guía; al presentarse una situación no contemplada en el plan, se debe realizar las modificaciones necesarias sobre el escenario esperado inicial. La dificultad en este punto se basa en que criterios modificar el plan, si no hay forma de cuantificar la incertidumbre. A través de la actualización del objetivo cambian los supuestos de las principales variables de proyección como precio, volumen de venta, costos unitarios, crecimiento anual, etc.; factores externos como el tipo de cambio, crecimiento del sector, inflación, PBI, etc.; se puede ajustar los resultados esperados para tener un plan que ayude a gestionar el nuevo escenario.

Sin importar el tamaño de la organización, es necesario establecer un plan para lograr el objetivo; por ejemplo si consideramos que el objetivo de la empresa es incrementar sus ventas en 10% en relación al año anterior, las acciones que realicen las diferentes unidades de la organización deben ir alineados al objetivo, en este caso el plan financiero debe estar encaminado en apoyar el objetivo a través del uso eficiente de los recursos económicos y financieros, y en base un análisis de la situación definir las estrategias y acciones que ayudar a concretizar el plan financiero para convertirlo en realidad.