Delegar tareas: el paso a paso.

Delegar tareas: el paso a paso.

Delegar tareas: ¿Cómo podemos hacerlo sin morir en el intento?

Hace unos días te comenté sobre 5 mitos que te impiden delegar. Ahora bien, una vez que reconocemos estos prejuicios, es necesario pasar a la acción y prepararse para delegar. 

En primer instancia,  es necesario que aclares mentalmente el o los propósitos de la delegación: 

  • ¿Necesitás disminuir la carga de trabajo? 
  • ¿Querés que tus colaboradores desarrollen nuevas habilidades?
  • ¿Querés que tu equipo gane mayor visibilidad y reconocimiento?

Una vez que tengas claro el propósito, es necesario determinar qué tareas vas a delegar, y qué destrezas y capacidades se requieren para completar satisfactoriamente la asignación.

  • Al momento de delegar, es fundamental que le brindemos toda la información posible sobre la tarea, a la persona seleccionada. El tiempo razonable para ello y todos los pormenores relevantes.
  • Asimismo, es necesario enseñar a la persona sobre cómo llevar a cabo esa tarea y es imprescindible mentorizar su progreso.
  • Es necesario que le brindes la confianza, medios y autoridad suficiente para ejecutar la tarea.
  • Una vez finalizada la labor, es necesario que le des una devolución en el momento adecuado, evitando interpretaciones y generalizaciones y procurando que sea útil para el futuro.

¿Qué tareas podés delegar?

En primera instancia, enumerá todas las actividades que llevas a cabo día a día en tu empresa y remarcá cuáles son las tareas claves que solo vos podés desempeñar.

Y por otra parte, hacé una lista de tareas que podría hacer otra persona, siempre y cuando le expliques el procedimiento a seguir.

Veamos algunas ideas de tareas que puedes delegar:

  • Administración y gestión contable.
  • Atención al cliente.
  • Gestión de Redes Sociales.
  • Generación y publicación de contenidos.
  • Gestión Web.
  • Embudos de venta y automatizaciones.
  • Publicidad.

Tareas que no deberías delegar:

  • Decisión sobre la estrategia a seguir en tu negocio.
  • Decisiones sobre tu público objetivo.
  • Análisis de resultados.

Ahora bien, veamos el proceso de delegar paso a paso:

1) Delega desde el primer momento.

Si quieres saber cómo aprender a delegar, lo primero que vas a tener que hacer es delegar. Por ejemplo, si necesitás crear tu logo o estás bloqueado con algún cambio técnico de la web, no pierdas tiempo en eso y buscá profesionales que te ayuden.

2) Registrá todo lo que hacés.

Cada vez que hagas una tarea, te sugiero que vayas redactando en un documento todos los pasos a seguir. A medida que vayas ejecutando las tareas, vas a poder ir mejorando el proceso y anotarlo en dicho documento.

De esta forma, estás listo/a para  buscar un profesional para que se encargue de dicha tarea. Poco a poco estarás descargando responsabilidades en otros.

3) Buscá una persona que sea competente en varios campos.

Buscá profesionales que sean hábiles y que puedan ocuparse de un amplio abanico de tareas, aliviar carga de trabajo y garantizar resultados.

4) Tené siempre presente la visión de tu negocio, la meta a la cual querés llegar.

Y el último paso para aprender a delegar es saber hasta dónde querés crecer con tu negocio para seguir incorporando personas que te ayuden a conseguirlo.

Beneficios que vas a obtener al delegar.

Al asignar tareas, puedes reducir tu carga de trabajo y el nivel de estrés. 

Esto te permitirá disponer de mayor cantidad de tiempo para enfocarte en proyectos que requieren de tus habilidades, conocimientos y autoridad, al igual que en tareas de nivel más alto, como la planeación a largo plazo y la elaboración de políticas y procesos.

Al momento de delegar, los beneficios serán varios:

  • Confiar en tus compañeros te va a permitir abrir las posibilidades y descubrir nuevos métodos más eficaces para hacer las tareas. 
  • Delegar funciones para asumir otras distintas.
  • Si querés crecer, tendrás que asumir nuevos retos. Deberás dejar tareas menos importantes en manos de otros compañeros para hacer frente a objetivos mayores. 
  • Entender que no sos ni inmortal ni omnipresente.
  • Compartí todo tu aprendizaje para que tus colaboradores hagan lo mismo. De esta forma estarás creando una red de conocimientos.

Delegar tareas puede ayudarte a crecer y desarrollarte como profesional y a su vez proporciona a tus colaboradores oportunidades de desarrollar nuevas destrezas y talentos.



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