Después del debate sobre Cataluña en Directivos & Dirigentes
Después de que Rafael Montava, muy indignado, iniciara un hilo en D&D a raíz del famoso comunicado de la banca sobre el asunto de la independencia de Cataluña, se han sucedido innumerables comentarios donde, desgraciadamente, sólo han estado presentes tripas y mocos de los comentaristas y poca materia gris. Además, me ha sido imposible mover la discusión hacia el territorio de las relaciones económicas o empresariales impactadas por el procès, el moco o la tripa afluía una y otra vez.
Pues bien, me he propuesto pensar un poco en Cataluña mirando más allá de Fraga y La Junquera, o sea, pensar en España, y el problema con Cataluña es que nadie dice cuál es la solución, todos asumen el problema, y éste persiste, y por obviarlo, como hace el Gobierno, no desaparece (este Gobierno es especialista en "obviar"). Me niego a asumir la tesis orteguiana de que el problema catalán hay que "conllevarlo". Y ya que parece que este Gobierno agonizante no ha optado por enfrentarse al problema de ninguna manera, espero que el próximo que salga de las urnas lo primero que ponga en la mesa sea una propuesta conciliadora, agarrando el toro por los cuernos como hizo Cameron con Escocia.
Yo tengo varias propuestas que deberían debatirse seriamente, eso sí, pasando por una profunda reforma de la Constitución. Os las resumo (las tengo más desarrolladas, pero lo dejo para cuando haya que elaborar propuestas electorales):
El Problema del Encaje Territorial
1.- Derogación inmediata (en sentido figurado obviamente) de los Decretos de Nueva Planta emitidos por Felipe V para cargarse los fueros de Aragón, Cataluña, Valencia y Baleares, y volver al modelo de Monarquía Compuesta de los Austrias. Esto pasa por reconocer el reino de Aragón, de Valencia y Baleares, y el Principado de Cataluña. El resto de España, pertenecería al Reino de Castilla, respetando los fueros vascos y el reino de Navarra (que no se los cargó Felipe V porque vascos y navarros le apoyaron en la guerra de sucesión). Las CCAA actuales englobadas en Castilla serían meras circunscripciones administrativas con competencias similares a las que tuvieron las Diputaciones en su momento (ver más abajo).
2.- lo anterior es reconocer de facto la soberanía existente en esos territorios hasta Felipe V. Esa soberanía era una realidad histórica desde hacía muchos siglos atrás, que hunde sus raíces en la España visigoda.
3.- obviamente, esta reforma es de carácter federal, se devuelve parte de soberanía al territorio, fundamentada en la historia, pero manteniendo la jefatura del Estado, es decir, el actual Rey como cabeza del Estado. Considero innecesario plantearse un dilema República vs. Monarquía cuando ésta, a lo largo de la historia, nos ha servido mucho mejor y ha sido más flexible que la primera. En cualquier caso, los nuevos reinos no son independientes (ni siquiera España es independiente en el contexto de sus compromisos con la UE), entendido como que pueden "salirse" (opt-out) de la Monarquía Compuesta.
Esta reforma tiene varias ventajas:
- se elimina la estructura actual, desintegradora, centrifugadora e ineficiente, de 17 mini-estados, con 17 presidentes y 17 parlamentos, con competencias homogéneas insostenibles por los niveles de renta desagregados de cada uno de ellos.
- se reconoce la potestad de los territorios históricos para que desarrollen su propia forma administrativa, jurisprudencia, leyes, autonomía presupuestaria, etc. (desarrollo de derechos forales) bajo el marco integrador de la UE, a la que pertenece España, manteniendo España sus compromisos internacionales como Reino soberano dentro del Derecho Comunitario. Esto se plasmaría en un documento constitucional del reino, de forma similar a la de algunos Estados americanos de la Unión. Cada reino, obviamente, originaría un código civil propio, recuperando aquellos usos y costumbres históricos que considere le convienen. El Derecho Foral se recuperaría de nuevo en estos reinos.
4.- esta reforma pasaría por redefinir el congreso y el senado, así como disolver el actual régimen partitocrático y avanzar hacia un modelo efectivo, más democrático, de representación de los ciudadanos:
- elecciones a Presidente del Gobierno y ejecutivo independientes de las legislativas. Sistema de 2 vueltas.
- elecciones a Congreso (leyes ámbito estatal) y Senado (representación de los reinos). Mixto entre representación directa (1 diputado por circunscripción) + indirecta (% asignado a partidos, para que no se pierda la representación de las minorías)
- elecciones a Gobernador/Canciller/Presidente del Reino. Sistema de 2 vueltas.
- elecciones a los Parlamentos o Consejos de los Reinos (estarían reducidos a 7- 8 si reconocemos Galicia -) - mismo sistema electoral que el estatal -.
- elecciones a Fiscal General del Estado (directa o a través de los reinos). Los jueces serían completamente autónomos. Habría justicia a nivel foral y estatal (similar a las actuales repúblicas federales).
5.- La ventaja de esta propuesta es que vuelve a reconocer de nuevo derechos históricos, pero a la vez, simplifica el mapa administrativo español. Además, se mantendrían todos los reinos forales dentro de la UE, al no romperse España como nación, ya que, conceptualmente, es una cesión de soberanía desde el Estado central hacia sus regiones.
El Problema del Encaje Económico
1.- Se parte de la base de que los Reinos deciden federarse en la Monarquía Compuesta de Felipe VI, y ceden al Gobierno estatal las competencias básicas que como nación deben cubrirse: relaciones con el exterior, inmigración, defensa, seguridad interior para delitos estatales, etc. aparte de las políticas compartidas por los reinos para garantizar la convergencia de derechos sociales en el marco de la UE (sanidad y educación básicas, pensiones, etc.) y la convivencia básica (por ejemplo, obligación de conocer el español en todo el territorio estatal). Debe pues existir un presupuesto estatal que debería ser no menor del 20-25% del PIB español. En cualquier caso, en analogía con la UE, debe estar garantizada la unidad de mercado (licencias, inspecciones, etc. emitidas por cualquier reino serían válidas en en el resto del territorio, salvo las que tengan implicaciones de desarrollo territorial).
2.- Los reinos tendrán autonomía fiscal y recaudatoria, igualmente, tendrán autonomía presupuestaria plena. Responderán ante el Gobierno Estatal por el cumplimiento de los déficits, únicamente, ya que el Gobierno es responsable ante la UE por lo mismo. Los mecanismos de intervención de los reinos serán análogos a los de la UE respecto a sus Estados miembros.
3.- Los mecanismos de solidaridad inter-territorial serán análogos a los existentes actualmente entre los Estados de la UE, con las correcciones necesarias para garantizar los derechos sociales básicos en todo el territorio nacional. Asimismo, los reinos recibirán los fondos de la UE en función de los criterios que marque aquélla, como hasta ahora. Desafortunadamente, al igual que ocurre en la UE, unos reinos serán más ricos que otros y Castilla se llevará la peor parte ... pero, a su favor, la competencia fiscal pondría en ventaja a aquellos reinos más eficientes gestionando sus gastos (como pasa ahora en Madrid).
Nota: la problemática de transferencias interterritoriales se daría con más intensidad en el Reino de Castilla, que agruparía regiones actuales que son recibidoras netas de fondos (Extremadura, Andalucía, …) en el actual sistema de CC.AA. El modelo que propugno elimina la autonomía de gasto que tienen actualmente las CC.AA., que el caso de Castilla podrían convertirse en lo que fueron históricamente las Diputaciones (éstas obviamente desaparecerían, en un mundo conectado por Internet son un anacronismo) con potestad en el desarrollo territorial y su correspondiente administración.
Este modelo de Monarquía Compuesta podría incluso expandir la organización política de la Península a un nivel superior que el actual, integrando Portugal y Gibraltar.
Bueno ... ¡¡¡Acepto sugerencias!!!!
Jefe de Servicio de Obstetrcia y Ginecologia. Director of ObGyn Service. Referente Sanidad Programa Adapta Hospital del Sureste (Arganda del Rey).
9 añosMuy buen planteamiento, coincido totalmente contigo en que el problema de las indentidades se creo con la centralización de Felipe V. La viabilidad del proyecto choca con una desagradable realidad, no solo Cataluña ha fomentado en su educación la endogamia cultural, lo han hecho practicamente todas las CCAA, con menos invitación a la separación, pero buscando la misma diferenciación identitaria. Si ahora a un andaluz, e incluso a un castellano manchego le dices que vuelvan a ser "iguales" les da un pasmo.