Diferencias entre la ansiedad y la preocupación improductiva y productiva.

Para comenzar estamos en tiempos de incertidumbre, preocupaciones y cambios, y eso genera ansiedad.

Además la ansiedad es uno de los grandes problemas de nuestra era.

Por otro lado, la inestabilidad laboral y profesional tampoco ayuda.

Del mismo modo la dificultad para la conciliación personal y laboral genera más estrés.

Podemos diferenciar entre la ansiedad que “no aporta nada”, y la que sí “nos puede ayudar”.

Consecuentemente, la ansiedad, las preocupaciones y sus derivadas, aparecen en el ámbito personal y profesional.

Características de la Preocupación Improductiva:

1.      Se centra en escenarios lejanos del tipo de ¿Y si?

2.      Pone el foco en problemas imaginados sobre los que tenemos poca o ninguna capacidad de influencia.

3.      Suele conducir a centrarnos en lo mal que nos sentiríamos si realmente se llegara a producir el motivo de la preocupación.

4.      No se suelen aceptar ninguna solución de la preocupación, porque no se puede garantizar el éxito.

5.      Se busca intensamente la sensación de seguridad y certeza sobre el resultado imaginado.

6.      Tiene una visión demasiado estrecha y exagerada de la amenaza imaginada o del peor escenario posible (se tiende a catrastrofizar).

7.      Sensación de impotencia para afrontar la situación de preocupación.

8.      Alto nivel de ansiedad o angustia.

Al final llega un momento en el que sólo parece que vamos apagando fuegos.

Características de la Preocupación Productiva:

1.      Se centra en escenarios y problemas más cercanos, inmediatos y realistas.

2.      Lleva la atención a los problemas, escenarios o situaciones sobre los que tenemos algún grado de control o cierta capacidad de influencia.

3.      Nos lleva a centrarnos más bien en resolver el motivo y la causa de las preocupaciones.

4.      Nos permite probar y evaluar soluciones de las preocupaciones que nos inquietan, aunque no sean perfectas.

5.      Estamos dispuestos a tolerar un riesgo y una incertidumbre razonables ante lo que nos preocupa.

6.      Permite tener una visión más amplia y equilibrada de todos los factores relacionados con las preocupaciones; y permite tener la capacidad de reconocer los aspectos positivos, negativos o interesantes que pueda tener la situación.

7.      Produce una mayor sensación de autoconfianza en la propia capacidad para afrontar los escenarios, y las situaciones que generan preocupación.

8.      Se tiene un nivel de ansiedad o angustia bajo.

Basado en la Terapia Cognitiva para trastornos de ansiedad de David A. Clark y Aaron T.Beck. Descclée de Brower, 2012.

Conclusión:

Es posible aprender a convertir la preocupación excesiva e improductiva que no nos deja avanzar en una ansiedad más productiva y realista que nos permita pensar en la búsqueda de soluciones.

La adquisición de habilidades, recursos y aprender a dejar ir nos pueden ayudar a relativizar las preocupaciones, para justamente ayudarnos a encontrar las mejores soluciones que no nos deja ver la ansiedad, el estrés y las preocupaciones.

Un abrazo y buena suerte.

José Miguel Gil

Consulta privada y sesiones online.

Psicólogo Empresarial y del Trabajo Col. AO-10.124

Coach Ejecutivo y de Equipos Sénior CPS 10.161

Desarrollo de personas y equipos. Coaching. Formación para empresas y Gestión del Cambio. Consultoría de RRHH especialista en equipos

Formador y mentor de Habilidades Directivas, en empresas y Gestión del Cambio. 

Consultor y Trainer en Solución Creativa de Problemas.

Desde 2007, Fundador y Gerente de COANCO Coaching

Desde 2012, Presidente de ASESCO, Asociación Española de Coaching

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