Dime con quién andas…

Agosto para Rotary International está dedicado a la membresía y la formación de nuevos clubes. Es el momento ideal para reflexionar sobre la importancia de las personas con quienes decidimos rodearnos y cómo estas relaciones moldean nuestra vida.

Un viejo proverbio dice: "Dime con quién andas y te diré quién eres". Idea que ha sido respaldada por muchos pensadores y motivadores contemporáneos. Jim Rohn, quien comenzó su camino como orador en un club rotario y luego alcanzó fama mundial, lo expresó de manera concreta: "Eres el promedio de las cinco personas que te rodean". Robin Sharma , tituló uno de sus últimos artículos como "Si te rodeas de payasos, espera un circo". Además, la Dra. Caroline Leaf, en su libro "101 maneras de estar menos estresado", señala la importancia de entablar conversaciones con personas de diferentes puntos de vista para estimular nuestro crecimiento mental y emocional.

Una forma estupenda de desarrollar activamente tu cerebro es entablar conversación con personas que tienen opiniones y creencias diferentes. No sólo aprenderás más, sino que tu cerebro tendrá que esforzarse más para procesar la información. Esta estimulación mental es estupenda tanto para tu salud física como mental. Recuerda siempre escuchar sin juzgar, sin orgullo, sin arrogancia y sin condenar. Escucha y habla con el objetivo de aprender y crecer. (Leaf,2020)

Estas afirmaciones nos invitan a considerar con seriedad quiénes forman parte de nuestro círculo más cercano. Con quienes pasamos más tiempo tienen una influencia significativa en nuestra forma de pensar, en nuestras decisiones y en nuestras actitudes frente a la vida. Si nos rodean personas positivas, ambiciosas y con valores sólidos, es probable que esas cualidades se reflejen en nosotros. Por otro lado, si son personas que no comparten nuestras aspiraciones o que fomentan hábitos negativos, podemos vernos arrastrados hacia esas mismas actitudes.

Pertenecer a Rotary cobra relevancia, porque automáticamente, al unirnos a una organización de servicio, nos alineamos con personas que comparten un propósito común: servir a la comunidad, mejorar el entorno y hacer del mundo un lugar mejor. Estos valores no solo enriquecen nuestras vidas, sino que también refuerzan la ética y la responsabilidad en nuestro entorno.

Unirse no solo significa ser parte de un club; significa rodearse de personas dedicadas a tener un impacto positivo en la sociedad. Esto propicia el crecimiento personal, el desarrollo de habilidades de liderazgo y la expansión de una red de contactos con los mismos ideales. Un espacio de influencia es mutuamente beneficiosa, donde cada miembro aporta algo valioso a los demás.

De por sí, unirse a una organización de servicio implica sumergirse en una comunidad de personas con valores comunes y un compromiso con el servicio a los demás. Esta pertenencia ofrece beneficios que van más allá de la simple participación en proyectos:

• Desarrollo personal: Interactuando con personas de diferentes orígenes y experiencias, ampliamos nuestra perspectiva y desarrollamos habilidades como la comunicación, la colaboración y el liderazgo.
• Crecimiento profesional: Establecemos una red de contactos que puede abrir puertas a nuevas oportunidades laborales y de negocios, además de mantenernos actualizados sobre los temas más importantes de la comunidad y el mundo.
• Sentido de propósito: Trabajando en proyectos que tienen un impacto positivo en la comunidad, experimentamos una sensación de satisfacción y propósito, canalizando nuestra Responsabilidad Social Personal.
• Bienestar emocional: Participar en actividades sociales y construir relaciones significativas contribuye a nuestro bienestar emocional y reduce el estrés.

Ahora... ¿por qué Rotary?

Rotary se destaca por fomentar el desarrollo personal y profesional de sus miembros. Al unirte a un club rotario, tienes la oportunidad de:

• Conectar con líderes de la comunidad: Los clubes rotarios están compuestos por profesionales de diversos sectores que comparten su conocimiento y experiencia. Además, semanalmente asisten oradores para compartir temáticas que no encontrarías tan fácilmente en otros ámbitos.
• Desarrollar habilidades de liderazgo: Mediante la participación en proyectos y la toma de decisiones colectivas, los rotarios fortalecen sus habilidades de liderazgo. Un médico puede ser un buen tesorero, un arquitecto redactar actas, una maestra organizar un festival para recaudar fondos, y así sucesivamente. Se aprende haciendo.
• Servir a los demás: Rotary ofrece numerosas oportunidades para servir a las comunidades locales y globales, desde campañas de salud bucal hasta la erradicación de enfermedades a nivel mundial.
• Crear amistades duraderas: Las relaciones que se forjan en Rotary suelen trascender fronteras geográficas y culturales, sin distinciones.

Al elegir formar parte de Rotary, no solo decidimos servir a nuestra comunidad; también elegimos quiénes queremos ser y cómo queremos que nos vean los demás. Es invertir en uno mismo. Al elegir cuidadosamente nuestras relaciones, podemos crear un entorno que nos permita alcanzar nuestro máximo potencial y marcar una diferencia positiva en el mundo. Y si no encuentras un Club al que unirte... quizás puedas proponer uno nuevo dentro de los múltiples formatos existentes, que se adapten a tus posibilidades.

Así que, dime con quién andas… ¿y te diré quién quieres llegar a ser?