El deporte en equipo como modelo de gestión: no te olvides de tu capitán/a.
Carles Puyol, Laia Palau, Pau Gasol, Alexia Putellas, Iker Casillas, y un largo etcétera de capitanes y capitanas tanto de selecciones como de equipos que han marcado época. Personas que han llegado a ser más importantes que el staff técnico o directivo.
¿Pero quien es la persona capitana? ¿es la persona que más goles mete? ¿la que más goles para? ¿Que mejor distribuye el juego? Pues puede que en ciertas ocasiones alguna de estas anteriores se cumpla pero la caracteristica principal de una persona capitana normalmente no suele ser ninguna de estas.
Según el Dr. Francisco Enrique García Ucha, "el capitan/a ocupan un lugar de que permiten la regulación del equipo en pos de sus metas, dada su posición dentro de las estructura del equipo, sean estos colectivos o individuales. Ellos influyen de manera decisiva en la maduración del equipo, el control emocional y del comportamiento durante los entrenamientos y competencia". Queda claro pues, que la persona elegida tiene la función de ser la extensión del entrenador dentro del terreno de juego. Además, tiene una función de representación para el equipo de cara a la directiva y al equipo técnico permitiendo un estadío intermedio técnico favorable a los intereses generales del equipos.
Entonces, ¿qué caracterísicas tiene que tener una persona capitana? Para José Mourinho tiene mucho que ver con facilitarle su trabajo como entrenador. En cambio para Guardiola, el capitán debe tener el respeto de sus compañeros y tomar decisiones por el bien del equipo.
Capitán/a y lider
Estoy de acuerdo con lo que estos dos grandísimos entrenadores indican pero para mí hay un detalle que le hace dar un paso adelante y convierte al capitán en líder. Déjenme que les cuente una historia.
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Cuando siendo más joven jugaba a balonmano, tras estar tpracticamente todo el año de nuestra liga Regional como líderes nos la jugabamos en un último partido contra nuestro eterno rival. Ellos no se jugaban nada salvo fastidiarnos lo cual les mantenía bien enchufados y a nosotros, nos estaban fallando las piernas. A falta de 5 minutos de ese último partido perdíamos de 3 y, por tanto, la liga. Tras robarnos el balón en un ataque, miré a nuestro capitán y cabizbajo le dije que estaba todo perdido. Él gritó: ¡No, vamos j...r! No lo hizo con rabia, sino con el enfado de creer en lo que decía. En esos cinco minutos gracias a esa energía remontamos los 3 goles y acabamos ganando por tres.
A pasado tiempo, pero desde ese día he entendido que además de otras características, lo que convierte al capitán en líder es la Fé (si, con mayúscula).
Fé en su trabajo. Fé en conseguir los objetivos independientemente de las circunstancias. Fé en sus compañeras y compañeros y Fé en los valores de la institución o equipo que representa.
Hay gente que a nacido con esa capacidad, son los y las "Messis" del liderazgo. Pero hay otros y otras que tenemos que entrenarlo cada día para poco a poco mejorar en nuestra función de líderes. Como el amor, la compasión y la empatía, la Fé también se entrena.
Pues, siempre se ha dicho que Fé mueve montañas, pero sobre todo mueve equipos.