El Error: La Clave Oculta del Proceso Creativo
Después de cinco años dedicado a mi proyecto empresarial en el campo de los biomateriales, estoy de vuelta a mi pasión original: la creatividad. Este tiempo lejos del mundo de la formación y la consultoría me ha dado una lección fundamental que quiero compartir hoy: el valor del error.
Durante este proceso, cometí errores, algunos pequeños, otros significativos. Pero lo que descubrí es que cada uno de ellos me empujó a ser más flexible, más curioso y, lo más importante, más resistente. A menudo nos enfocamos tanto en evitar el fracaso que olvidamos que, sin errores, no hay aprendizaje profundo ni innovación real.
El error no es el enemigo, es un compañero inevitable en el camino hacia cualquier meta ambiciosa. Nos obliga a detenernos, a replantearnos lo que creíamos saber, y a descubrir perspectivas que no habríamos considerado de otra manera. Si todo funcionara a la perfección desde el principio, el proceso creativo sería superficial.
Este tiempo me enseñó que el error es, en realidad, una herramienta poderosa. No porque nos guste fallar, sino porque fallar nos da la oportunidad de crecer, de adaptarnos y, sobre todo, de reinventarnos. Como dice un famoso refrán: "El éxito es ir de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo."
Así que, al retomar mi rol como consultor en creatividad, traigo conmigo esta lección. La creatividad no surge solo de generar ideas brillantes, sino de aceptar que algunas fallarán, y que esas fallas son las que nos guiarán hacia el próximo gran descubrimiento. El camino creativo es, en el fondo, una serie de intentos, ajustes y, sí, errores, que nos conducen a las soluciones más inesperadas.
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Ambos recursos ofrecen una perspectiva valiosa sobre cómo el error es un motor de la creatividad.
Consultora SAP Business One en Sistec - Grupo Igarle
2 mesesMuy didáctico