El ghosting y porqué debes dejar de ponerle atención

El término ghosting originalmente comenzó a usarse para indicar la práctica irrespetuosa y poco saludable de cortar comunicación con otra persona, en ella se ignoran los mensajes, llamadas y correos de forma deliberada.

Es una queja muy común en los procesos de reclutamiento, donde los candidatos mencionan constantemente que no reciben ninguna información posterior al envío de su curriculum o incluso después de tener entrevistas.

Pero también le sucede a proveedores, cuando profesionistas de una empresa solicitan información, documentación o cotización de un producto o servicio y no vuelven a contactarse, ni siquiera para informar que lo recibieron o que se decidieron por alguien más.

Imagina que vas en la calle y una persona se acerca a ti y te llama por tu nombre, lo normal es ponerle atención. Si te encuentras a esa persona de nuevo y te pregunta qué pasó desde la última vez que se encontraron, le responderás.

Ahora imagina que la segunda o tercera vez que te lo encuentras, te sigues de largo y no volteas a ver a la persona, no le haces caso, ¿cómo se ve eso? Mal ¿verdad?, de mala educación y hasta grosero.

Bueno, esa es la impresión que dan los profesionales y las empresas para las que trabajan cuando realizan estas prácticas.

Pero ¿porqué no debes hacerle caso? Debido a que si es por falta de educación, poco profesionalismo, no tiene ningún poder de decisión o por mala gestión del tiempo y de la información, no hay nada que puedas hacer al respecto y si lo hace deliberadamente entonces es una empresa con la que no quisieras trabajar de todas formas.

Ocupa el tiempo en seguir buscando quienes deseen trabajar contigo, quienes valoren lo que les presentas, porque el ghosting va a seguir y te lo vas a seguir encontrando.

No es que la tecnología haya hecho que la gente sea así, ya lo eran y las nuevas formas de comunicación los exhibe.

Claro, hay procesos que tardan un poco más, situaciones donde la decisión depende de otra persona, pero no está demás responder a la gente cómo va su propuesta o si se está esperando una respuesta de alguien más o ya se tomó otra decisión, no quita nada, deja uno limpia su imagen y la de la empresa.

Tampoco importa cuantas veces se pregunte, si el proceso no se ha cerrado, hay que responder, ¿acaso no te gustaría que te hicieran lo mismo?

No podemos cambiar a otros pero si podemos mejorar la forma en la que nosotros nos comunicamos con los demás. Hay que ser amables, asertivos y siempre ofrecer una respuesta o avance.

"Si quieres hacer del mundo un lugar mejor, mírate a ti mismo y haz ese cambio. Yo empiezo con el hombre en el espejo" - Michael Jackson