EL LÍDER ACTUAL Y SUS COMPETENCIAS CLAVES

EL LÍDER ACTUAL Y SUS COMPETENCIAS CLAVES

Cada vez más personas / colaboradores esperan un liderazgo organizacional sustentado en un sentido propósito personal alienado con el corporativo, la transparencia está transformando rápidamente el rol de la alta gerencia en estos entornos de volatilidad y ambigüedad . La situación que estamos atravesando nos lleva a muchos a mirar hacia arriba para comprobar si tenemos el liderazgo adecuado para atravesar esta tormenta.

Pero esto no es de ahora. Las organizaciones ya estaban migrando antes del COVID 19: A la transformación digital, nuevas metodologías de trabajo, anticipando en contextos inciertos un sin número de cambios que muchas organizaciones supieron ver e implementar y otras, en cambio, no prestaron suficiente atención. Lo que parece claro es que entramos en un escenario complejo en el que necesitaremos tener a los mejores profesionales ejecutivos al frente de las empresas. Y cuando hablo de los mejores no siempre son los que más poder tienen. El liderazgo no son las gerencias centrales o generales de una compañía, el liderazgo aplica también a jefes y mandos que tienen entre sus funciones la responsabilidad de gestionar personas y, por tanto, la oportunidad de activarlas para retos importantes de negocio. El liderazgo actual nos trae un perfilado diferente con competencias, habilidades críticas y capacidad de análisis en estos momentos que vayan más allá que un comité de dirección pueda hacer, es decir, llegar a todos los mandos de la organización y a todos los colaboradores, es estar con los equipos de trabajo, es estar con las personas y liderar con ellas, promoviendo una cultura de acompañamiento que sea mucho más efectiva, propiciando la seguridad y el bienestar en nuestros colaboradores.

En un entorno de convulsión social, económica y corporativa, vamos definiendo los rasgos actuales del nuevo líder: ágiles, coaches, empáticos, cercanos, transparentes, digitales, resilientes, e innovadores.

Si caminamos hacia organizaciones más colaborativas, necesariamente tendremos que cambiar los comportamientos y apoyarnos en la comunicación para establecer nuevos marcos de relación con las personas.

Y es que la comunicación interpersonal es la reina de la comunicación, el tipo de comunicación que mantenemos con nuestros equipos determina el tipo de relación que queramos tener con ellos. El estudio de Adecco Group Institute de este año, nos dices que el 70% de los jóvenes líderes del futuro, señalan que es más importante la comunicación interpersonal que los conocimientos técnicos de un directivo. Es, sin duda, una actualidad que nos hace poner foco en variables críticas para que esa comunicación funcione como son:

• Empatizar. Es esperar que uno haga o diga lo que esperan los demás que hagamos o digamos para establecer grados de confianza. Conectar con las situaciones y entender las necesidades para obrar en consecuencia, desde la razón y corazón.

• Escuchar. saber escuchar es una de las características que más valoran los empleados de sus líderes. Además, es la base de la confianza. Ahora que muchas compañías no pueden tener cerca a sus equipos, por la virtualidad, necesitarán gestionar en base a la confianza que se haya construido en este tiempo.

• Asertividad. Es evidente que es una de las características que nos define como seres humanos. Escojamos bien las palabras en nuestras comunicaciones. Es importante lo que decimos pero más importante es cómo lo decimos.

• Retroalimentación. Se dice que el "feedback" es un regalo: hay que saber entregarlo y recibirlo. Bien gestionado, es un impulso enorme para cambiar y mover a la acción. Lo ideal es que sea cada semana.

Desplegar el rol del líder comunicador como una de las partes importantes de la gestión, nos ayudará a tomar mejores decisiones; aumentará el compromiso de nuestros equipos y mejorará su rendimiento, marcando un sentido de pertenencia de ellos hacia las organizaciones. Un empleado comprometido con los objetivos que vayan en la misma dirección a su sentido propósito, multiplica por tres su productividad. Esto cae en la misma proporcionalidad en aumentar la experiencia del empleador y aumentado los grados de experiencia del empleado, pese a las dificultades de esta crisis global que estamos y estaremos por los próximos meses.

Fuente: ObservatorioRH

Jesús Espejo Palmer / Gestión Humana / contacto@growteams.pe / +51 942362719

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