El líder optimista

Optimismo, del latín optimum (“lo mejor”).

Optimismo es la predisposición para entender y a analizar la realidad desde su aspecto más positivo. El diccionario de la Real Academia Española (RAE), además, reconoce otra acepción del término, mencionando que puede aludir a la doctrina de carácter filosófico que le otorga al universo el mayor grado de perfección posible.

La NASA contrata antes a personas con un elevado coeficiente de optimismo que a las que lo tienen bajo, y lo valora tanto como la inteligencia, a la hora de elegir a sus astronautas. Porque lo peor es hacer un viaje al espacio con una persona negativa que esté pendiente y se preocupe de todos los ruidos o de si un tornillo está más o menos flojo. Siempre es mejor contar con personas que trabajen y colaboren en positivo. En la actualidad se mide más a la gente por su optimismo. (Francisca Ayza Ferrer. Psicóloga y pedagoga. Entrevista en información España).

Dennis Perkins en su libro sobre Shackleton “Lecciones de liderazgo” (1) marca algunas claves de estrategia que hacen a un líder triunfador, dentro de ellas están: 

·       Nunca pierda de vista la última meta y concentre su energía en objetivos a corto plazo. 

·       Dé ejemplo personal con símbolos y conductas visibles y fáciles de recordar.

·       Inspire optimismo y autoconfianza, pero aférrese a la realidad. 

·       Encuentre algo que celebrar y algún motivo con el que reír. 

Estas son algunas estrategias de Shackleton para liderar al límite. Conductas que están basadas en el optimismo propio de un líder para salir adelante, más allá de las dificultades que en el caso de este expedicionario, eran al límite.

El mismo autor del libro, Dennis Perkins, menciona al coeficiente de optimismo como la proporción entre los optimistas y los pesimistas de un grupo. Puede intuirla desde el momento en que está seleccionando personas para construir su equipo y su contribución a los resultados puede ser superior a la del conocimiento técnico o académico de sus miembros. Después de todo, tanto el optimismo como el pesimismo son tremendamente contagiosos y actúan de forma resonante o disonante sobre el clima emocional del grupo. (2)

Respecto a los optimistas, se ha observado su elevada relación con diferentes rasgos de personalidad y la inteligencia emocional. Las personas optimistas muestran menores niveles de neuroticismo y mayores niveles de extraversión y estabilidad emocional, así como una relación positiva con la amabilidad y responsabilidad (Carver y Connor-Smith, 2010; Carver et al., 2010; Kam y Meyer, 2012) (3). Factores relevantes para asumir el liderazgo.

Un líder optimista tiene una motivación alta para alcanzar sus metas y promueve la motivación en sus equipos. Además, esta característica hace que le imprima a sus equipos una impronta distinta, que le ayuda a movilizar a las personas hacia el mejor nivel de sus talentos. El líder optimista promueve la resiliencia organizacional en todos los colaboradores y permite pararse rápidamente en fracasos y dificultades, y lo más importante sacar aprendizajes de todo ello. El optimista es distinto de un soñador, ya que el optimismo se basa en la experiencia tal como lo menciona el psiquiatra Luis Rojas Marcos en su libro “La fuerza del optimismo”(4), este puede ser innato o aprendido, y se puede conseguir con el entrenamiento. Además, según Rojas Marcos, "el equipaje genético desempeña un papel más determinante en el pesimismo de la persona que en el optimismo. De esto se deduce que el entorno en el que crecemos, las experiencias que vivimos y nuestro aprendizaje tienen un mayor impacto sobre nuestro nivel de optimismo que de pesimismo. Por lo tanto el optimista es a su vez realista basado en ese bagaje de aprendizaje. El soñador sin aprendizaje construye fantasías. El optimista ocupa su voluntad para construir realidades.

Andrés Muñoz Díaz

Referencias

1.     Lecciones de liderazgo.Las 10 estrategias de Shackleton en su gran expedición antártica. Dennis Perkins, Ediciones Desnivel, Madrid, 2003. 

2.     José Luis Pérez. Cartografía emocional.

3.     Cuestionario para la evaluación del optimismo: Fiabilidad y evidencias de validez. Ignacio Pedrosa et al. Universidad de Oviedo España. Ter Psicol vol.33 Nº 2 Santiago jul. 2015

4.     Luis Rojas Marcos. La Fuerza del Optimismo. De bolsillo. 2007.