El libro negro del asesor de empresas (Episodio 93/365) / Costes hundidos

El libro negro del asesor de empresas (Episodio 93/365) / Costes hundidos

En economía se conoce como "coste hundido" a aquellos gastos ya realizados que ya no pueden recuperarse y que, por tanto, no deberían influir en las decisiones de negocio presentes y futuras.

En el contexto de los despachos profesionales dedicados al asesoramiento, esos "costes hundidos" pueden manifestarse de muchas formas:

En primer lugar, está el tema de la inversión en tecnología obsoleta.

Si un despacho ha invertido en programas o equipos que ya no se ajusta a las necesidades actuales del mercado, o de los clientes, ese gasto debería considerarse como hundido.

Aunque la inversión inicial fue significativa, no debería impedir que el despacho actualice o cambie sus sistemas para mantenerse competitivo.

Es lo mismo que ocurre con la formación muy especializada.

Podemos haber invertido mucho tiempo y dinero en formación específica o de actualización pero que, con el tiempo, se ha ido volviendo irrelevante debido a cambios legislativos.

Si ese conocimiento no nos da seguridad, o ya no es útil, el coste asociado a su adquisición no debería influir en las decisiones sobre futuras necesidades de formación.

Te pongo de ejemplo dos casos: el primero personal.

El Centro de Estudios Financieros (CEF) tiene un curso sobre de "Perfeccionamiento y Actualización Tributaria" y así se llama porque trata de las novedades en materia tributaria que afectan a los asesores fiscales. Pues bien, el hecho de que yo lo hiciera el año pasado - recomendado por mi amigo y colega Rafa Ruiz de "Castellana Consultores" - nada impide a que este año vuelva a cursarlo, como el día de la marmota, ya que la normativa cambia y tenemos que mantenernos actualizados.

El otro ejemplo podría estar relacionado con haber cursado un "carísimo" MBA. Pues bien, si te gastaste una pasta en ese curso hay una buena noticia y una mala. La buena es que todavía puedes mantener el contacto con tus compañeros de pupitre y es posible que esa amistas haya aumentado.

La mala noticia es que - tal vez - algunos de los conocimientos, sobre todo los más avanzados o tecnológicos, se podrían haber quedado anticuados. Por este motivo, es bueno seguir a personas del tipo Enrique Dans para mantenerse actualizado en esas novedades. En cualquier caso, esto sólo sería un ejemplo, ya que ha otras cuestiones relacionadas con las finanzas, marketing, etc. que necesariamente también deberían ir actualizándose. Tal vez no sea necesaria una revisión anual, o con la frecuencia de las legales, pero si al menos caca 3-5 años.

Otro coste hundido podría estar relacionado con el uso de estrategias de marketing obsoletas.

Los gastos en estrategias de marketing o publicidad que no estén dando resultados positivos son costes hundidos.

Continuar con estas estrategias solo porque se ha invertido en ellas en el pasado no es beneficioso para el negocio.

El desafío para los despachos profesionales es reconocer estos costes hundidos y no permitir que influyan en las decisiones actuales.

En lugar de ello, deberíamos centrarnos en cómo asignar de manera eficiente los recursos presentes y futuros para maximizar el retorno de la inversión y el valor del negocio.

Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Más artículos de José Antonio Avellaneda (PERICIUS)

Otros usuarios han visto

Ver temas