El Placer de Ser Infiel
El ser humano mantiene un eterno conflicto entre la RAZON y el DESEO. El deseo de probar y experimentar y la necesidad de mantenerse estable y comportarse con rectitud. Ser fiel a sus ideales y apegarse a un estatus quo. Pero estamos hablando de vinos!!!! Así que despreocúpate. No me voy a meter en terrenos frágiles y peligrosos que desconozco.
En cuanto a vinos se refiere, en la variedad está el placer. Déjame contarte que hay tal variedad de cepas, estilos y marcas, que ni probando diariamente un vino distinto, me alcanzaría la vida para probarlos todos! Sin embargo, eso no quiere decir que no lo intente. Entre más variedades conozco, más amo al vino. Una misma cepa, cultivada en un mismo país, pero en diferentes regiones, nos va a hablar diferente.
Cada denominación de origen de cada país y cada bodega aportan un elemento único a sus botellas. Es así que mi recomendación cuando algunas personas me aseguran que no les gusta una uva, es que justamente le den la oportunidad de probarla de nuevo, pero de otras marcas u orígenes. Por ejemplo; hay quienes no toman vino blanco porque les parece muy "fuerte". Quizás quieren decir ácido? Entre los blancos; dependiendo de la cepa o variedad, hay muchos perfiles de acidez, una de las características destacables y deseables en un blanco por la frescura.
Concentrémonos; por ejemplo, en una cepa muy famosa y reconocida; la Sauvignon Blanc. Originaria de Francia, pero difundida y cultivada en muchos países del mundo. En climas fríos, la Sauvignon Blanc produce vinos diferenciados por sus aromas a hierba fresca recién cortada, a espárragos y tiene cierta mineralidad. En cambio, en climas templados o cálidos, destacan las notas de frutas como el melocotón, piña, maracuyá y manzana.
En Francia, en la zona de Burdeos, la Sauvignon Blanc se mezcla con la Semillón (otra uva blanca) para producir deliciosos y potentes vinos, con cuerpo, mineralidad y gran acidez; me refiero a Sancerre. Pero también en la región sur de Burdeos, estas mismas uvas se unen para producir los exquisitos vinos dulces que reciben el mismo nombre de su región, Sauternes.
Nueva Zelanda ha cobrado su fama gracias a la devoción por esta cepa, introducida en la isla hacia 1970. En sus suelos arenosos, poco fértiles y bien drenados junto con su clima marítimo, se producen vinos con gran acidez y frescura con notas muy pronunciadas de espárragos y frutas tropicales como el maracuyá. Muy intensos.
Los Sauvignon Blanc de Chile son apreciablemente menos ácidos que los de Nueva Zelanda. Por otro lado, los Californianos decidieron influenciar sus Sauvignon Blanc con barricas de madera para dominar su intensidad y se conoce como Fumé Blanc.
En fin, con tan solo una cepa he querido poner en contexto la diversidad y riqueza en cuanto a vinos se refiere y el placer de probarlos es infinito. Por lo tanto, lo único a lo que soy fiel es al vino. Vale la pena permitirse el gusto de probar y seguir probando, puedes descubrir que te gusta una cepa en un estilo muy específico y otra cepa en un rango mayor de opciones o combinada con otras más.
Salud!
@vinumpanama