El poder de cuidarnos y caminar juntas

Queridos lectores,

Hoy quiero hablarles de un tema que toca profundamente a muchas personas: el cáncer de mama. Octubre es el mes de la concientización, y me parece el momento ideal para recordar la importancia de la prevención temprana. Un diagnóstico temprano salva vidas, y aunque este tema pueda parecer incómodo, la prevención es poder.

Durante mi carrera he aprendido la importancia de cuidar no solo nuestra mente y nuestras emociones, sino también nuestro cuerpo. A menudo hablamos de liderazgo, de transformación, de dejar huella en los demás, pero… ¿qué huella estamos dejando en nuestra propia vida? Cuidarnos también es liderar, y la prevención es un acto de amor propio.

Desde hace algunos años, he tenido el privilegio de participar en la Caminata AVON por la detección temprana del cáncer de mama, y cada vez me emociona ver la cantidad de personas unidas por esta causa. Hombres y mujeres, principalmente mujeres, caminan juntas por ellas mismas, por otras, por las que ya ganaron la batalla y por aquellas que aún están luchando. Es imposible no conmoverse al ver tantos corazones latiendo al unísono por la misma causa. Es un recordatorio poderoso de que estamos juntas en esto, de que la detección temprana puede marcar la diferencia.

Sabemos que el cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres, pero lo que a veces se pasa por alto es lo mucho que podemos hacer para reducir riesgos. A través de simples acciones de prevención —como los autoexámenes, las mamografías periódicas y un estilo de vida saludable— podemos detectar el problema a tiempo y aumentar considerablemente las posibilidades de tratamiento efectivo.

Personalmente, tengo amigas y colegas que han pasado por esta experiencia, y algunas de sus historias han sido de superación, porque supieron tomar acción a tiempo. Estas mujeres son un recordatorio constante de que tenemos que escuchar a nuestro cuerpo y no dejar para mañana lo que puede salvarnos hoy.

Entonces, ¿cómo podemos empezar a cuidarnos mejor?

1. Autoexploración mensual: Dedicar unos minutos cada mes para conocer nuestro cuerpo y notar cualquier cambio.
2. Mamografía anual: A partir de los 40 años (o antes, si hay antecedentes familiares), una mamografía puede ser la diferencia entre la detección temprana y un tratamiento más efectivo.
3. Estilo de vida saludable: El ejercicio, una dieta balanceada y la reducción del estrés contribuyen enormemente a la salud de nuestros cuerpos y mentes.
4. Conversación con tu médico: Si algo no se siente bien o tienes dudas, ¡no esperes! Hacer una consulta puede darte tranquilidad y es el primer paso hacia el cuidado.

Tu salud, tu liderazgo

En nuestro rol como líderes y emprendedores, a veces olvidamos que no podemos dar lo mejor de nosotros si no nos cuidamos primero. No se trata solo de cuidarnos por nosotros mismos, sino también por aquellos que nos rodean y nos necesitan.

Hoy quiero invitarte a hacer una pausa y reflexionar: ¿Estás cuidando de ti tanto como cuidas de tus proyectos o de tus seres queridos?

Cuidar de nuestra salud es una forma de liderar con el ejemplo. Es tomar responsabilidad por nosotros mismos para poder seguir dejando huella en el mundo.

La invitación es a #DejarHuella cuidando nuestra salud. Este mes, te animo a tomar acción. Hazte una mamografía, habla con tu médico y comparte esta información con quienes te rodean. Nunca sabemos a quién podemos estar ayudando.

Con cariño,

Cecilia Giordano

#DejarHuella #Prevención #SaludFemenina #CaminataAvon