EL PRINCIPIO DIRECTIVO REAL SOBRE GANAR-GANAR

Ser feliz

En un mundo que se mueve a velocidades excesivas, en ocasiones, hablar de felicidad parece frívolo, superficial y una pérdida de tiempo. He escuchado colegas que afirman que no tienen tiempo para la felicidad, es más, ni siquiera tienen tiempo para pensar en ella. Sin embargo, distanciarse de la felicidad puede ser una forma de alejarse, también, de la productividad y del éxito profesional.

De acuerdo a Sonja Lyubomirsky, y su libro “The how of hapiness”, la felicidad tiene un claro efecto en el ámbito laboral, ya que produce personas más creativas que puedan resolver problemas eficientemente y que, por lo tanto, serán más productivas. Las personas productivas adquieren mejores empleos, logran acuerdos más sobresalientes y, por supuesto, mayores ingresos. Pero los beneficios no se detienen ahí. Las personas felices tienden a ser excelentes líderes, negociadores más efectivos y, ya que se relacionan de forma más eficiente con los demás, tienen relaciones más satisfactorias.

Por otro lado, la vida personal también se enriquece ya que las personas felices logran relaciones de pareja más duraderas, más y mejores amigos y, por si fuera poco, se enferman menos y son más fuertes porque desarrollan el sistema inmune. Además, lidiarán más eficientemente con el estrés y la frustración.

Parece que ser feliz es una situación de ganar – ganar. Invertir tiempo y energía en serlo debería interesarte.

Sonja Lyubomirsky, científica de la Universidad de California y una de las más destacadas investigadoras acerca de la felicidad, estima que, en promedio, el 50% de nuestro nivel de felicidad es genético, el 40% está en nuestro control, es decir, depende de cada uno, de nuestro interior, de nuestras actividades y nuestros pensamientos y solo el 10% se relaciona con circunstancias como edad, género, condición física, estatus económico o nivel de educación, contrario a lo que la mayoría supone.

Siguiendo ésta fórmula de la felicidad de Sonja Lyubomirsky, si queremos mejorar nuestro nivel de felicidad y disfrutar sus beneficios, nos tendremos que enfocar en trabajar en ese 40% que realmente está en nuestro poder, centrándonos principalmente en:

• Identificar y utilizar nuestras fortalezas
• Disfrutar de relaciones de calidad (amigos, pareja, familia)
• Hacer ejercicio
• Encontrar un propósito de vida
• Desarrollar una mentalidad expansiva
• Ayudar a otros (servicio a la comunidad)
• Tener y alcanzar metas
• Encontrar un trabajo que nos guste

Si trabajas por mejorar cada uno de estos aspectos, tu nivel de bienestar emocional incrementará.

 Fuente:

The how of happiness, Sonja Lyubomirsky