El reconocimiento como necesidad humana.

¿Qué tan seguido y cómo reconoces el trabajo, actitudes, esfuerzo o entusiasmo de tu gente?

El reconocimiento es fundamental en la gestión de un liderazgo positivo, es una forma muy sencilla de agradecer a nuestros colaboradores por el trabajo diario o engrandecer alguna acción concreta. Sin embargo, en muchas ocasiones, confundimos reconocimiento con ceremonias en las que se entregan diplomas o medallas, se dan discursos de agradecimiento y se expone públicamente al individuo, pero, ¿sabes qué es lo que realmente hace que tu gente se sienta reconocida? ¿Te has dado la oportunidad de involucrarte en conversaciones más profundas para identificar qué acciones tendrán realimente un impacto en tu equipo? o ¿asumes que sabes lo que ellos quieren?

Tomemos en cuenta que hay quienes sufren por el simple hecho de pensar que serán reconocidos frente a una multitud, también están los que no necesitan un reconocimiento monetario sino un fin de semana extra de vacaciones o aquellos que buscan escalar en el organigrama y desean con todas sus fuerzas una capacitación que les permita ampliar sus horizontes.

El reconocimiento que buscamos, evoca una necesidad humana de ser “considerados” en los diferentes ámbitos de nuestra vida, si no trabajamos en función de esto, la desviación negativa genera menosprecio y les aseguro que nadie, sintiéndose así, será un elemento que sume a nuestras organizaciones.

Como líderes, tenemos la responsabilidad moral de generar bienestar, no sólo a nuestros colaboradores sino a todos los que por alguna razón se cruzan en nuestro día a día.

Por el bienestar organizacional, de su gente, el tuyo, el mío, el de todos… Isa