El vota azul de las mujeres en EEUU se viste de rosa

El vota azul de las mujeres en EEUU se viste de rosa

Las luchas políticas también se identifican con los colores, lo sabemos todos. Lo hemos visto por años en nuestros países. En EEUU demócratas usan el azul y republicanos el rojo para identificarse.

La indumentaria, por eso y otras cosas más, habla siempre de lo que proponen quienes intentan dirigir o liderar y muchas veces habla, junto al lenguaje no verbal, más que las palabras. Hace 4 años Hillary Clinton pedía a sus electoras identificarse vistiendo prendas blancas.

Era una especie de homenaje a las votantes de principios del siglo pasado en EEUU y, al mismo tiempo, la forma de mostrar la “fuerza” del voto demócrata en un proceso que ya sabemos cómo acabó.

Esta vez, por propuesta de la casa de ropa Argent (una marca que dedica parte de sus ganancias a la lucha feminista), se pide hacerlo de rosa y en redes sociales las electoras están publicando sus fotografías con la etiqueta #AmbitionSuitsYou.

Aunque yo no tengo rechazo porque el marketing comercial y el político confluyan en algún momento, esto parece molestar a asesores y dirigentes, pero en todo caso, parece que no ocurre igual con quienes hoy ha vuelto tendencia el color rosa y la etiqueta.

A propósito de esto y de que, en mis historias de Instagram, siempre estoy publicando imágenes con mucho rosa quiero contarles que no es la primera vez que este color es usado para denunciar la misoginia del actual presidente de EEUU.

El pussy hat se convirtió en un símbolo de denuncia entre feministas y otras que no militan pero que también se han sentido ofendidas o defraudas por Trump. El rosa ha empoderado a las mujeres estos años en luchas de distintos tipos.

En la India, por ejemplo, la lucha contra la violencia machista de las mujeres se reconoce casi de inmediato cuando las vemos con sus preciosos saris rosa. Es un color de protesta, es un color de denuncia y de reclamo firme.

A diferencia de lo que se ha querido vender este no es un color que muestre debilidad, cursilería o una feminidad sumisa y si logramos usarlo unificadamente, con convicción y con respeto a la diversidad, incluso, empoderarnos, porque es un color fuerte (deriva del rojo).

De hecho, cuando revisamos la historia de la moda, el vestido o la indumentaria, encontramos que, a principios del siglo XX, los niños vestían de rosa y niñas de azul porque era más dulce y cálido.

Recuerda la experta en política y moda, Patrycia Centeno que el primer uso del color rosa “como declaración política ocurrió alrededor de 1925 cuando la revista Time acuñó 'pinko' para cualquiera que tuviera inclinaciones comunistas, socialistas o ultra liberales”.

Es así como hoy, las mujeres en EEUU, están sacando de sus armarios prendas rosa que hacen que sus ropas sean #vestidosdepoder.

Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Otros usuarios han visto

Ver temas