Emprender en Barranquilla Colombia en 2024

¡Ser emprendedor en Barranquilla es una aventura llena de retos y, a veces, de obstáculos enormes! La energía y el impulso que se necesitan para sacar adelante un negocio se ven afectados por factores externos que pueden desanimar hasta al más entusiasta.

En Barranquilla, y la costa Caribe en general, los emprendedores se enfrentan a varios desafíos, que van mucho más allá de simplemente conseguir financiación o manejar la operación diaria del negocio. Estos obstáculos se han ido acumulando y afectan de manera crítica la estabilidad de los emprendimientos en la región.

1. Trámites burocráticos interminables

El proceso para formalizar un negocio es largo y complicado. Los emprendedores deben lidiar con innumerables trámites y permisos con entidades con diferentes entidades, lo cual no solo consume tiempo sino que también eleva los costos iniciales. En ocasiones, los procesos burocráticos pueden retrasar el inicio de operaciones de una empresa por meses, lo que impacta directamente en la viabilidad y las finanzas de los nuevos proyectos.

2. Inseguridad y extorsión

Un tema crítico que afecta la Costa Caribe, y especialmente a los emprendedores en Barranquilla, es la extorsión. Grupos ilegales, como el Clan del Golfo y bandas locales, han incrementado su presencia en la región, exigiendo pagos a comerciantes y dueños de negocios bajo amenazas. En el Área metropolitana de Barranquilla y otras zonas del departamento del Atlántico, estos grupos han utilizado métodos intimidatorios como panfletos, ataques a propiedades y, en casos extremos, violencia física para ejercer control sobre las actividades económicas.

La falta de recursos y/o efectividad de las instituciones de seguridad, como la Fiscalía Policía, Ejército entre otros, dificultan el combate efectivo de estas actividades ilícitas. Para los emprendedores, esto significa operar bajo un clima de temor constante, preocupados no solo por mantener las ventas, sino también por garantizar la seguridad de sus empleados y clientes. La extorsión no discrimina el tamaño del negocio: tanto grandes empresarios como pequeños tenderos incluso vendedores informales se ven obligados a enfrentar esta realidad, lo que afecta directamente la sostenibilidad y el crecimiento de sus emprendimientos.

3. Acceso limitado al financiamiento

Aunque existen opciones de financiamiento, los requisitos para acceder a ellos suelen ser prohibitivos para los pequeños emprendedores. Las altas tasas de interés y la necesidad de presentar garantías o historial crediticio dificultan la obtención de capital. Además, los bloqueos en la ciudad, como los que se han vuelto frecuentes en los últimos años, afectan las operaciones y generan inestabilidad, lo que disuade a inversionistas y dificulta aún más la financiación.

4. Bloqueos y manifestaciones constantes

Barranquilla se ha visto afectada por bloqueos diarios en puntos críticos de la ciudad y del departamento del Atlántico. Estos bloqueos interrumpen las actividades comerciales, afectan el transporte de mercancías, ademas los delincuentes aprovechan estos bloqueos para saquear camiones con mercancía, buses y carros particulares, esta situación genera pérdidas considerables para los negocios. Un emprendedor que depende del flujo constante de productos y clientes encuentra que estos bloqueos se convierten en un gran dolor de cabeza, desestabilizando la operación diaria y generando incertidumbre. Esto afecta, especialmente, a los negocios que operan en sectores como el transporte, la logística y el comercio, retrasando entregas, aumentando costos y afectando la reputación ante los clientes. Por otro lado los productores agrícolas se enfrentan con pérdidas hasta del 100% de sus cosechas al no poder transportarlas.

5. Competencia desleal e informalidad

La presencia de negocios informales crea un entorno de competencia desleal. Al no estar sujetos a los mismos impuestos y regulaciones, estos negocios pueden ofrecer precios más bajos, lo que dificulta que los emprendedores formales compitan en igualdad de condiciones. Además, la informalidad es una puerta abierta para otros problemas, como la inseguridad y la falta de garantías para los consumidores.

Reflexión final

Creo firmemente que emprender en Barranquilla y en la Costa Caribe Colombiana no es para los débiles de corazón. Los desafíos son múltiples y van desde la burocracia hasta problemas sociales complejos como la inseguridad y los bloqueos. Sin embargo, es admirable ver cómo todos nosotros los emprendedores de la región seguimos luchando por sacar adelante nuestros negocios, buscando soluciones creativas y haciendo frente a las adversidades, sacando fuerzas de nuestro corazon directa a nuestra pasión. Esta es una invitación a las autoridades y a la sociedad a trabajar en conjunto para crear un entorno más favorable para el crecimiento social, el emprendimiento, donde los sueños puedan convertirse en realidades sostenibles.

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