Empresas Familiares. ¿Qué tan importante es tener un plan efectivo de sucesión?

Hola queridos lectores. Primeramente, les deseo que se encuentren y arranquen bien este 2021, que seguramente nos traerá nuevos retos y hay que estar listos para enfrentarlos de la mejor manera. Debemos estar preparados para apuntar hacia un año lleno de éxitos y muy saludable en la medida de lo posible. Y muy importante, pensar en acciones masivas que hagan que sus metas se cumplan de manera holgada y siempre prepararnos muy bien en “aquello” donde decidamos apuntar. ¡Un abrazo!

Acto seguido y entrando en materia de mi pequeño artículo de hoy, quisiera reflexionar un poco sobre este tema que es crítico en donde el 83% de las empresas en México son familiares. Empresas que generan empleos y mueven la economía nacional en gran medida y tristemente solo el 33% pasa de la primera a la segunda generación y peor aún solo el 12% de ellas pasan a una tercera.  

Impresionante también es saber que todos estos dueños de negocio, fundadores y empresarios exitosos piensan que es más importante tener foco en ser eficientes estratégica y organizacionalmente hablando…, que revisar primero temas clave como el gobierno corporativo y familiar, la gestión patrimonial y un tema que hace doler la cabeza y que se llama, mediación y conflictos. Y sucede que cuando surgen eventos clasificados en los últimos tres que aquí menciono…, la eficiencia no ayuda ya en mucho. Y es aquí cuando pensamos que debimos haber hecho algo para tener un plan de familia o haber diseñado un código de acuerdos familiares. Todo esto nos hubiera resultado tan conveniente en su momento y ahora tarde, nos enfrentamos a conflictos que nos quitan la atención en la estrategia de la compañía y claro en el correcto liderazgo de nosotros como dueños.

Y esto me trae a la reflexión de que hay cuatro pilares clave que hay que considerar al momento de ir pensando en crear un plan de sucesión efectivo. Y estos cuatro pilares deben ser el fundamento o la cimentación de lo que hoy se conoce como un protocolo familiar efectivo. 

El primero de ellos es hablar con la verdad. Y este pilar se refiere a fomentar la comunicación abierta y honesta entre los miembros de la familia. Una comunicación adecuada, efectiva se logra hablando con la verdad. Y esto a su vez va a generar unión y muy importante confianza entre los miembros. Cuando se genera desconfianza…, se pierde la paz. La verdad en cambio hace que nuestra empresa sea mucho mas productiva, más competitiva y más rentable. 

El segundo pilar es el trato con justicia. Aquí el reto es que la justicia o ser tratado justamente es que cada uno tiene su propia percepción de lo que es justo. Y por esto, ¿debemos hacernos las preguntas de si cada uno de los miembros de la familia recibe lo que le corresponde de acuerdo con su condición de familiar, empleado o accionista? Entonces, aquí es cuando se enlaza este tema con el del apalancamiento mínimo que debe tener la empresa y que tiene que ver con la definición y documentación de roles de cada uno de los miembros de la familia. Los ingresos a que se tiene derecho, en función de lo que hace en la compañía y los KPI´s del miembro familiar. ¿Cómo lo vamos a medir? ¿Cómo sabemos que hace lo que se espera de él? Por todo lo anterior, siempre es mejor dejar las reglas claras desde un principio, pues la justicia se mide versus lo previamente acordado. 

El tercer pilar es saber perdonar. Cuando vivimos en el pasado y mantenemos rencores de eventos que ocurrieron tiempo atrás, estamos instalando barreras muy fuertes que impiden que se trabaje en paz y se lleguen a acuerdos de manera fácil. Cuando perdonamos, recuperamos nuestras vidas. Se libera tu mente y puedes continuar con tu vida poniendo energía en tus prioridades, en lo verdaderamente importante. Perdonar también nos da la oportunidad de sacar provecho a las diferencias que tenemos entre los seres humanos y claro, entre los miembros de la familia. Y siempre poniendo el proyecto empresarial como prioridad y que queremos que perdure por varias generaciones. 

Cuarto pilar: tener esperanza. Lo primero es saber y entender porque la familia quiere seguir trabajando de manera unida hacia el futuro. Y las respuestas a lo anterior es meramente esperanza de un futuro mejor para la empresa como para cada uno de los miembros de la familia. “Juntos podemos…”, “juntos nos apoyaremos…”, etc. Trabajar juntos no es un trabajo sencillo y a veces menos como familia. Pero si lo podemos lograr, si compartimos la esperanza de lograr algo juntos. Cuando las cosas se complican, es bueno tener una razón para seguir adelante. La esperanza nos fortalece para seguir luchando con optimismo superando cualquier barrera y desilusión. 

Y así podemos concluir amigos, de lo importante que es revisar este tema más pronto que después cuando ya los eventos han ido demasiado lejos, y la complicación de llegar a un acuerdo se haga más difícil. En la empresa familiar la esperanza se manifiesta en la definición de un sueño común por el que todos los miembros de la familia estarían dispuestos a hacer esfuerzos y sacrificios. Es una visión familiar de un mañana mejor, donde todos disfrutamos de una empresa próspera y eficiente, exitosa y más importante que nada…, que se desarrolla en paz. Arranquemos pues con este tema, arranquemos con este proceso que es más valioso que el destino mismo. Lo que se vive en un proceso como este hace que la familia permanezca unida y felices con empresas que pasan de una generación a otra, sin sobresalto. 

Si tienes dudas de cómo llevar a cabo un proceso exitoso de sucesión no duden en buscarme. Yo te ayudo. ¡¡¡Hasta la próxima!!! 

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