¿EN QUE ESTAMOS?
Luis Alejandro Rizzi
Vivimos días lamentables en los que parecería que el ridículo, la estupidez, el cinismo, el agravio y la mentira son virtudes y que nuestro objetivo es convertirnos en una gran letrina institucional, que significa un lugar sucio y asqueroso.
La CELAC, demostró que es una cueva creada para cobijar a lo peor de la política regional, pero gracias a Dios hubo voces como la de Boric, Lacalle Pou, desde otra forma de pensar, por cierto mas moderna y a la altura de los tiempos, la del presidente del Paraguay, que generaron una esperanza en el sentido que más allá de lo que nos pasa, hay políticos que siguen creyendo en los valores genuinos de la República democrática.
La CELAC demostró también que pese a la bullanga populista hay tipos que de algún modo están presos de sí mismos, como el tal Maduro, que prudentemente optó por quedarse en su casa, sabe que no es bien recibido en ninguna parte, salvo Rusia, Irán, Corea del Norte y Cuba.
Por otra parte, es difícil pensar que un presidente en ejercicio pudiera ser detenido, en otro país, pero él sabe que es un delincuente político, se esposa solo.
Lula está demostrando que las segundas partes se repiten como farsa, aunque la primera no haya sido “TRAGEDIA”, sino todo lo contrario.
De todos modos, hay un dato que debemos tener en cuenta, parecería que no tiene interés en reunirse con Cristina y si se reuniera hoy, tendría más el valor de un gesto de caridad que de empatía. Si hubiera tenido interés en verla, ALBISTUR no habría sido obstáculo.
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Sergio Massa, mostró su verdadera dimensión cuando agravió al Uruguay tratándolo como un hermano menor algo travieso. Es evidente que su neurosis se expresa como complejo de superioridad, pero no de los mejores, sino el superior de los peores.
El presidente uruguayo con calidad personal, lo ubicó en su nivel de persona que careció de infancia como el famoso don Fulgencio, pero Massa ni siquiera da para eso. En todo caso, más bien sería una suerte del otro yo el Dr. Merengue, personaje creado por el célebre humorista Divito, donde se exhibía como lo que realmente era, una mal tipo, un jodido.
La denuncia que se pretendió hacer en la ONU sobre el poder judicial fue más que un papelón, fue una desgracia que nos exhibió como una autocracia frustrada o en descomposición, nuestro mal olor, obligó a una ventilación y fumigación urgente de los despachos de la ONU, en Ginebra.
El país fue fumigado. Creo que nunca se había llegado a este extremo de desprecio.
El dólar se sigue fugando hacia la barrera de los 400 pesos, luego será de los 500 y así sucesivamente. La maniobra del superministro 86-puso de manifiesto que la galera ya no le funciona, sus conejos son de utilería, y sus trucos ya son aburridos, porque todos los conocemos.
El ministerio de economía, está en manos, de lo que llamaría la última grela, ejerce desde el guardarropa y ayer recibió la limosna de Lula, que parece que financiará por un año las exportaciones de Brasil a la Argentina, con garantía de "todos y todas".
Mas deuda.
Lula logró su objetivo, pero debemos preguntarnos a cuanto estará el dólar el 25 de enero de 2024…Ese es el problema.