Equipo, equipo, equipo

La mejor manera de llegar a cualquier meta, reto u objetivo es tener un equipo de alto rendimiento. Pero eso no surge por generación espontánea, hay que trabajarlo y mucho, en un proceso continuo no exento de frustraciones pero que dan como resultado una auténtica obra de arte. Lo primero es que, como líder, tienes que dar ejemplo, estar ahí en la proa del barco. Ser comunicativo y accesible, organizado pero flexible; utilizando la inteligencia emocional para establecer conexiones personales con el equipo, y de ahí poder conocer cuales son las motivaciones de cada uno (análisis social). Delega en quien creas que puede llevar a cabo una función y orientale como hacerlo, pero dale libertad y revisa con él los resultados: si son buenos felicita; si no lo son "vamos a ver en qué hemos fallado". Haz participe al equipo de la marcha del negocio y consulta algunas decisiones, involucrandoles en el resultado final.

¿Cuando sabremos qué es realmente un equipo?Cuando los miembros se comuniquen y cooperen de manera fluida, incluyendo con su responsable; cuando se comprendan y acepten de manera mutua, y se sientan responsables de sus propia conducta y aprendizaje. Y sobre todo cuando sientes que tus colaboradores no quieren huir de su lugar de trabajo, si no disfrutar de sus logros de manera individual pero sobre todo celebrándolos de manera colectiva.