No es malo el que falla...

De la colección "Cosas que me hubiese gustado saber antes"

Es bastante frecuente encontrarse con jóvenes (y no tan jóvenes) que se esfuerzan constantemente por hacer las cosas sin errores. Eso está naturalmente bien y más en un ambiente laboral tradicional donde existe siempre una competencia (explícita o implícita).

Sin embargo cada vez es mas común encontrarnos en situaciones, momentos o entornos donde fallar es positivo. Donde fallar es la base del crecimiento. Donde fallar es necesario para ser exitoso.

No hay nada mas peligroso que un profesional que no ha fallado. Quien no ha fallado, no conoce el sentimiento de amargura de ver que sus esfuerzos fueron en vano, de ver que "todo se va por la borda" y de sentirse el peor profesional en su área. Quien no ha fallado, no sabe buscar el aprendizaje de su error. No sabe buscar los positivo dentro de lo negativo.

Ten presente que si no has fallado algunas veces, es probable que te encuentres siempre dentro de los limites conocidos, del área "sin riesgo". No es algo "malo" estar dentro de los limites conocidos, pero sé consciente que no salir de los limites conocidos limitará tu velocidad de aprendizaje, de crecimiento profesional y a la larga herrumbrará tu capacidad de superación.

Si bien es importante fallar, lo más importante es levantarse y aprender de las cosas que nos llevaron a fallar. Pasar ese trago amargo y ver lo bueno dentro de lo malo.

¿Entonces...es bueno fallar constantemente? No! Es bueno fallar....pero en determinadas circunstancias.

Falla temprano, es decir, realiza el aprendizaje lo antes posible. Falla barato, en ambientes donde el daño sea acotado. No falles en algo que es vital para el negocio, tu economía o tu reputación. (esta última es difícil reconstruirla).

Falla una única vez en el mismo problema. Quien falla repetidamente en lo mismo, ha fallado en aprender y eso sí que es una falla grave.

Si fallas, aprende!! Si fallas, enseña! Si fallas, no lo hagas dos veces en lo mismo.

Si fallas, aprende! Si fallas, enseña! Si fallas, no lo hagas dos veces en lo mismo.