Homo Digitalis
Hace mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana... Recuerdo que estudiaba en la universidad y leí un libro llamado “Homo Videns. La sociedad teledirigida” del sociólogo Giovani Sartori (1924-2017). En él, se plantean conceptos muy interesantes como el fin del homo sapiens y cómo la imagen audiovisual (la televisión) ponía punto y final al pensamiento abstracto. Es decir, la televisión no solo comunica; crea a un nuevo humano, el Homo Videns, a interés de unos cuantos.
Años más tarde, el informático Nicholas Negroponte dio un paso más allá y estableció lo que llamó “Being digital” (1996). En su libro, analizaba las tecnologías de la época (1995) e intentaba predecir el futuro. Muchas se han cumplido exponencialmente.
Las teorías de Sartori y las predicciones de futuro de Negroponte son ya el hoy y el ahora, pero a la vez, parte de la sociedad va más allá. Como consumidores, muchos somos un híbrido (mitad videns, mitad digitalis). Sin embargo, las nuevas generaciones son únicamente digitales.
Nuevos desafíos del Homo digitalis
- Alone together. Define la nueva dimensión relacional del hombre. Ocupamos un espacio físico, pero nuestra atención está en nuestra pantalla.
- FOMO: Fear of Missing Out. Miedo a quedarse fuera. La dependencia y adicción de esa vida paralela en las redes sociales, revela que muchos jóvenes están "exhaustos" por el uso de dichas redes, pero sienten que no tienen otra opción.
- Ética en horas bajas. La descarga de archivos, la piratería, el copy/paste en internet son algunos ejemplos. ¿Ésto nos aleja de valores comúnmente aceptados? La tecnología no es el causante del problema, pero dificulta el pensamiento ético.
- Participación. Hay una mayor participación en lo social y en lo político por el anonimato que favorece la red. Pero también convive con un cierto recelo por las opiniones vertidas que puedan afectar a un posible acceso en un puesto laboral.
- Trabajo. En la vida laboral, está muy claro cómo la tecnología nos ha cambiado: va en nuestro bolsillo, está en la mesa mientras cenamos, incluso en la mesilla de noche. Ya no se necesitan grandes espacios para crear, sino cualquier proceso creativo puede discurrir en los nuevos espacios virtuales que crea la tecnología.
- Googlear. El acceso y la disponibilidad de información sí ha modificado nuestras actuaciones y actitudes en relación con ella. Antes, buscar información requería tiempo. Teníamos el hábito de leer, parar de leer y pensar en lo que uno está leyendo. Ahora no se procesa la información tan bien. La tendencia es absorber sin pensar.
Escrito por Joan Margarit Moreno.