IA Generativa: El valor de la IA y la Imaginación Empresarial

La inteligencia artificial generativa está evolucionando a una velocidad récord, sin embargo, las habilidades de quienes dirigimos los negocios se encuentran en una acelerada carrera de aprendizaje en todas sus aristas, desde el valor comercial, hasta enfrentarnos a los desafíos potenciales que representa esta tecnología.

Desde el lanzamiento de ChatGPT basado en un LLM que se lanzó en noviembre 2022, han aparecido cientos de aplicaciones, utilidades y claro, otras herramientas competidoras y complementarias, como Dall-E, Bard, Midjourney, Stable Diffusion por mencionar algunas.

Sin embargo, luego del “momento metaversico” que se vivió en 2021 cuando Meta lanzó su estrategia, muchos tomadores de decisión en posiciones estratégicas se preguntan:

 ¿Es la IA una exageración tecnológica o un momento disruptivo? La respuesta se encuentra en el valor que la IA genera para cada negocio, el cuál ha demostrado ser increíblemente poderoso. La IA generativa fue “democratizada” con el ingreso de ChatGPT que llegó a 100 millones de usuarios en tan solo dos meses.

Acorde a la firma Accenture, las tareas lingüísticas representan el 62% del tiempo laboral de las personas, y de la cuota global de tareas lingüísticas, el 65% tiene un gran potencial para ser automatizado o aumentado por los denominados “grandes modelos de lenguaje” o LLM como ChatGPT.

Aclarando algunos conceptos comunes

• IA Generativa: Algoritmos capaces de generar contenido nuevo de manera eficiente en formas “no estructuradas”, por ejemplo, de texto a imagen, de allí su nombre “generativa”.
• GPT: significa Transformador Generativo Pre entrenado, un tipo de red neuronal artificial que utiliza aprendizaje profundo (muchas capas de redes neuronales)
• LLM: Large Language Model – Modelo grande de lenguaje que puede ser entrenado en grandes cantidades de texto que está disponible públicamente en Internet y cubre muchos temas diferentes, consta de una red neuronal con muchos parámetros entrenados

El nivel de accesibilidad a la IA incrementó la curiosidad de los usuarios y la interacción fue impactante, dándole nuevos atributos a los chatbots tradicionales con modelos básicos, aumentando al máximo sus capacidades, gracias al uso de redes neuronales. 

La primera de las inteligencias artificiales, la “IA Estrecha”, es decir la que solo podía realizar una tarea, pasó en tan solo un par de meses, a una “IA general” en donde la comprensión semántica jugó un papel fundamental para poder desarrollar tareas bastante complejas, como diseñar una estrategia de marketing, comercialización, combinar tópicos de distintas ramas, hacer resúmenes, apoyar las áreas legales, etc.

Aun cuando la precisión es un desafío, hay múltiples casos de uso que pueden mejorar, acelerar y escalar áreas de negocios a otro nivel, ya que esta IA generativa puede ser aplicable transversalmente a distintas verticales de negocios, aportando a las distintas áreas, ampliando las competencias de quien sepa gestionar el mayor provecho de la IA.

Re imaginar es la clave, junto con el upskilling y reskilling

Las habilidades con que muchos tomadores de decisión contaban, deben añadir rápidamente skills digitales que le permita mapear, analizar y utilizar la IA de manera productiva para llegar al momento de la “Inteligencia Aumentada”, ese momento donde la IA complementa la capacidad humana y se evidencia un incremento productivo en el potencial y resultados.

Acorde a un reciente artículo reciente de la consultora McKinsey, remarca cómo la IA generativa puede “habilitar capacidades en una amplia gama de contenido, incluidas imágenes, video, audio y código informático. Y puede realizar varias funciones en las organizaciones, incluyendo clasificar, editar, resumir, responder preguntas y redactar nuevo contenido”, esto hace que el uso de la IA permita potenciar el trabajo de múltiples actores de negocio:

La educación, gestores comerciales y de servicio al cliente, gestores de fraudes, áreas financieras, legales, redactores de contenido, diseñadores gráficos, asistentes virtuales, personal de marketing,  áreas de medicina, etc. todos seremos impactados y el potencial de uso se limita a la aplicación que la creatividad que el ser humano encuentre para aplicar, por lo que esta útil tecnología necesita ser gerenciada humanamente, lo que hoy se denomina humanismo digital.

Gerenciar la IA, involucra equilibrar el riesgo y la creación de valor, en otras palabras, desarrollar estrategias para liderar las oportunidades, desde la planeación, organización, dirección y control, sin olvidar los aspectos éticos que deben estar involucrados en toda gestión tecnológica con impacto humano.

Te invito a leer más contenidos y a este importante momento de inflexión estratégica.

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