¿Innovación desde una perspectiva personal? “Disrupt Yourself”
Se habla mucho de innovación al interior de las compañías y cómo trabajar en ello de forma consistente le aporta a las organizaciones un impulso y unas oportunidades sin precedentes; cuando una compañía crece en nuevos mercados en lugar de establecerse en uno solo, las posibilidades de éxito son 6 veces más altas y el potencial de ingresos 20 veces mejor. No es fácil cuantificar los efectos de una disrupción personal de la misma manera, porque no se dimensionan los beneficios sociales y emocionales, es claro sin embargo, que en esta época de cambios constantes y muchas veces abruptos los resultados de no reinventarse pueden significar un rezago en nuestras carreras y negocios.
No todo el mundo tiene que abandonar el camino tradicional, si el objetivo es llegar a una dirección en tu compañía actual y sientes que definitivamente vas por el camino correcto, la disrupción es innecesaria. Por otro lado si lo que buscas es un cambio que ofrezca resultados diferentes y un crecimiento inorgánico a nivel profesional y personal, ya sea porque has llegado a un punto en donde te sientes estancado o sospechas que no serás feliz en el peldaño superior de la escalera que estás subiendo, entonces debes ser disruptivo contigo mismo, pero hay que hacerlo de forma estratégica.
- Identifica tus fortalezas: Una empresa generalmente establece las necesidades no satisfechas en el mercado y define la manera de resolverlas apalancada en sus fortalezas distintivas. Muchas veces sin darnos cuenta soportamos nuestro valor en atributos que muchos tienen y por lo tanto no logramos diferenciarnos entre la multitud. Es por esto que debemos combinar nuestras características personales con la visión adecuada para así lograr un posicionamiento que nos permita destacarnos en nuestro entorno.
- Da un paso atrás (o hacia los lados) con el fin de crecer: Cuando las organizaciones se hacen muy grandes dejan de explorar los mercados más pequeños, más arriesgados y lucrativos debido a que los ingresos no incrementaran significativamente sus resultados. Esto genera oportunidades a nivel personal y profesional, ya sea dentro de una organización o como emprendedor, sólo es cuestión de identificar nuevos espacios, arriesgar un poco, proponer y desarrollar nuevas ideas que tengan un impacto profundo en nuestro desarrollo.
- Permite que la estrategia fluya: La innovación disruptiva también se basa en lo que ha sido descrito como estrategia emergente. Para ser disruptor, se requiere ser flexible, muchas veces dar un paso al frente, revisar e intercambiar ideas y adaptarse en consecuencia. El profesor Amar Bhidé de la Universidad de Columbia ha demostrado que el 70% de las nuevas empresas de éxito terminan con una estrategia diferente a la que inicialmente perseguían. Un ejemplo bien conocido es Netflix, que comenzó como un servicio de alquiler de DVD de puerta a puerta, pero ahora se centra en el distribución y producción de contenido vía streaming.
Es innegable que la innovación también funciona a nivel personal, no solo para emprendedores que lanzan proyectos novedosos sino para profesionales que se mueven entre compañías, sin embargo, quienes lo hacen exitosamente han trabajado en ello de forma consistente y estratégica. Si realmente deseas moverte hacia delante, debes innovar desde adentro.
Como escribió John D. Rockefeller, "Si usted quiere tener éxito, usted debe actuar por nuevos caminos, en lugar de viajar por caminos desgastados."