INNOVACIÓN EN MODELOS DE NEGOCIOS BASADOS EN ECOSISTEMAS

En la economía moderna, la innovación en el modelo de negocios es esencial para el éxito empresarial. No se trata solo de lo que vendemos, sino de cómo lo vendemos y cómo creamos valor. En el complejo entorno de negocios global actual, los modelos de negocios son aún más vitales, y diseñar un ecosistema completo que se adapte a un entorno empresarial en constante evolución resulta la clave de la sustentabilidad y el éxito a largo plazo.

Dicen que Platón dijo que la necesidad es la madre de la invención. Y sí… En un mundo en constante evolución, la adaptación es la clave para no desaparecer. La innovación se ha convertido en la clave para la supervivencia y el éxito a largo plazo.

La innovación en productos y tecnología ha sido siempre el foco tradicional de atención de la gestión empresarial, pero en los últimos tiempos, hemos descubierto que el éxito de los desarrollos empresariales más espectaculares de los últimos años, más que en el desarrollo tecnológico, se basan en la creación o innovación de sus modelos de negocios.

Empresas exitosas como Mercado Libre, Pedidos Ya, Despegar y tantas otras, han demostrado que no basta con ofrecer productos o servicios de alta calidad, sino que es fundamental repensar y reinventar continuamente cómo entregamos mayor valor a los clientes. Deberíamos mirar más allá de la innovación de productos y considerar cómo innovamos en nuestros modelos de negocios.

Lo que digo es que deberíamos considerar el modelo de negocios de nuestra empresa como un activo estratégico. Un modelo de negocio innovador puede abrir nuevas oportunidades de mercado, crear ventajas competitivas y garantizar la sostenibilidad a largo plazo. No se trata solo de qué vendemos, sino de cómo lo vendemos y cómo creamos valor para nuestros clientes. Estar

dispuestos a cuestionar y adaptar constantemente nuestros enfoques comerciales tradicionales sin conformarnos con lo que funciona hoy, aplicando una mentalidad de "reinvención continua" y explorando cómo podemos mejorar constantemente y crear nuevas formas de generar valor.

En la actual era de la transformación digital, los modelos de negocios se vuelven aún más cruciales. La interconexión global y la rápida mutación de los comportamientos de consumo están creando oportunidades y desafíos sin precedentes. Las empresas deben estar dispuestas a abrazar la innovación en su núcleo y redefinir completamente su modelo de negocio para adaptarse a un mundo en constante cambio.

El diseño de un modelo de negocios surge, principalmente de la integración de una nueva mirada al mercado, identificando nuevos problemas de los clientes y un nuevo cliente objetivo, una propuesta de valor innovadora que resuelva estos problemas, y procesos innovadores capaces de materializar la propuesta de valor. Finalmente, el aspecto financiero de ingresos y estructura de costos debe ser tenido en cuenta. En definitiva, un modelo de negocios explica cómo va a funcionar ese negocio.

Sin embargo, si queremos entender cómo va a funcionar un modelo en el complejo entorno de negocios global actual, no basta con diseñar las características de nuestra propia empresa, necesitamos diseñar un ecosistema completo, o al menos la forma de adaptarnos al mismo. Y en ese sentido, diseñar un sistema de relaciones con los principales actores empresariales de nuestro entorno: clientes, proveedores y competidores.

Esto implica que se requieren capacidades complementarias que evolucionen en forma conjunta, y para ello, es esencial adoptar un enfoque de innovación abierta que permita el diseño con otros actores, compartiendo conocimientos, experiencias y enfoques, y poniendo primero las necesidades del ecosistema en el centro de la discusión.

En un modelo de negocios basado en ecosistemas, una empresa crea un entorno donde múltiples actores, como empresas, desarrolladores, proveedores y clientes, pueden colaborar y participar. Las plataformas suelen ser la base tecnológica que permite esta colaboración. Las empresas que operan en el centro de un ecosistema a menudo desarrollan y mantienen la plataforma que conecta a todos los participantes. Las plataformas proporcionan un lugar común para que los participantes del ecosistema interactúen. Esto puede incluir la creación de aplicaciones y servicios que se integran en la plataforma, lo que permite a diferentes empresas o individuos contribuir al ecosistema.

En muchos modelos de negocios basados en ecosistemas, la plataforma desempeña un papel fundamental en la generación de valor y la monetización. Las empresas pueden obtener ingresos mediante la venta de aplicaciones, publicidad, tarifas de suscripción o comisiones por transacciones realizadas en la plataforma. Las plataformas pueden permitir un crecimiento escalable del ecosistema, ya que nuevos participantes pueden unirse y contribuir fácilmente. Esto puede conducir a una mayor innovación y diversidad de ofertas en el ecosistema. Las plataformas exitosas tienden a crecer a medida que más empresas y usuarios se unen y participan.

Así, en el futuro, las divisiones y límites tradicionales que solían calificar a las empresas, se volverán menos claras y definidas a medida que las plataformas digitales y tecnológicas transformen completamente la forma en que funcionan las industrias.

En lugar de empresas individuales operando de manera aislada, veremos un mayor nivel de interconexión y colaboración entre empresas, creando un entorno empresarial más integrado y colaborativo, en el que se compartirán recursos, datos y tecnología para lograr objetivos comunes y ofrecer mayor valor a los clientes.