Isabel Escribá

No se si fueron las circunstancias, la casualidad o bien la necesidad lo que hizo que Isabel fuese nodriza o ama de cría de una de las familias ricas de la burguesía catalana aproximadamente entre 1898 y 1910. Compaginó la crianza de sus hijos con los de la señora de la casa, ¿Cómo hicieron señora y nodriza para coordinar embarazos y lactancia? Pues no sabría deciros, lo que si es cierto es que cada uno de los hijos de Isabel tuvo, lo que popularmente se llamaba en aquel momento y sin el doble significado que tiene ahora, un hermano de leche.

Esta práctica se ha llevado a cabo a lo largo de miles de años ya que se cree que sus inicios están en la prehistoria, y no ha sido hasta mediados del siglo XX, en la que la incorporación de sustitutivos a la leche materna para la alimentación de los niños pequeños, lo suficientemente válidos en el mercado, la ha hecho desaparecer, por lo menos en Europa y America del Norte, no tengo datos para confirmar que sea así a nivel mundial.

Imagen del futuro Luis XIV con su ama de cría, pintado por Charles Beaubrun 

Encontramos distintos casos que apoyaban esta practica, a veces gratuita y otras retribuida, por ejemplo:

• Cuando una mujer fallecía al dar a luz y era necesario alimentar al recién nacido, solía buscarse entre la población cercana otra mujer que pudiese alimentarlo en su lugar.
• Cuando por compromisos o categoría social, quería "liberarse" a la mujer de la obligación de permanecer al lado de su hijo, y así seguir desarrollando la actividad que por su posición era requerida, solía contratarse a otra mujer para que lo cuidase y amamantase. En ocasiones, no siempre, la criatura era entregada a su nodriza, que no tenía porque vivir junto a la familia, y era devuelta a sus padres cuando ya andaba, sin que hubiese mayor contacto entre ellos que una visita de vez en cuando, si se creía conveniente.
• Los hospicios y casas de acogida necesitaban alimentar a las criaturas de corta edad, para ello en ocasiones contrataban a madres como nodrizas para que les alimentasen. Se había dado también la circunstancia que los mismos centros les daban alojamiento y en ocasiones protección a cambio del servicio que facilitaban a los huérfanos.

En diferentes países, momentos y culturas, hubo que regular el uso del oficio, puesto que si bien en algunos lugares podían estar bien vistas y consideradas, en otros muchos se dieron casos de abusos por parte de la familia que necesitaba sus servicios, al imponer normas que obligaban a abandonar prácticamente a los hijos propios, preferir mujeres solteras a las casadas para no tener que discutir con el marido o directamente dejaban los niños al cuidado de las esclavas de la casa según la época y el lugar. Era normal pedir antecedentes familiares, juzgar la salud de la piel, el tono de sus mejillas y muchos otros aspectos físicos de la mujer que optaba para el trabajo que se creían indispensables para facilitar el mejor alimento a la criatura. Por otro lado, también podía existir cierta picaresca por parte de las madres, como abandonar a los hijos en la inclusa para ser contratadas después para alimentarlos junto a los demás niños. Hubo épocas, no muy lejanas por cierto, en que era normal que mujeres del medio rural se desplazaran a las ciudades ofreciendo sus servicios como nodrizas a la espera de una mejora en su medio de vida para ella y sus familiares.

Opiniones a favor y en contra de cúal es la mejor manera de alimentar a los hijos, según la época y la moda. Por ejemplo, en las décadas de los 60 y los 70, del siglo pasado, existió una campaña que daba prioridad al uso de la alimentación no materna frente a la materna. Después la tendencia volvió a revertir, habiendo en estos momentos corrientes muy fuertes en ambos sentidos, con la posibilidad de escoger por parte de las madres sobre que opción usar y de alimentar a las criaturas adecuadamente cuando la madre no puede hacerlo.

Aunque actualmente existen los denominados Bancos de Leche, cuya finalidad es asegurar la alimentación con leche materna de los prematuros o neo natos que lo necesiten por prescripción médica, no es un concepto nuevo, ya a finales del siglo XIX se creo en Francia y rápidamente se traslado a varios países de Europa, entidades como La Gota de Leche. Se crearon en varias ciudades dependiendo de Hospitales, asesorados por doctores, ofreciendo además de alimento, mejoras en el cuidado de la infancia.

Es curioso que este sea, bajo mi punto de vista, uno de los pocos oficios o profesiones que sólo puede llevarse a cabo por uno de los sexos, y creo que eso ha sido uno de los factores que me ha incitado a escribir sobre él.

Las referencias históricas han sido extraídas de:

elhistoriador.com.ar /las-nodrizas-y-la-importancia-de-la-leche-materna-en-el-pasado/

ddd.uab.cat/pub/afin/afinSPA/afin_a2013m7-8n52iSPA.pdf  

albalactanciamaterna.org/lactancia/tema-3-manejo-de-la-leche-materna/bancos-de-leche-materna/

La Mujeren la historia - Eulalia de Vega - Biblioteca basica de Historia - Monografias