Jugar con la motivación a nuestro favor

¿Te pasa que hay un momento que debes hacer algo, pero no sientes ganas de hacerlo, o que simplemente comienzas y en un rato te aburres y ya no deseas seguir con ello?

Lo primero, es no sentirse culpable. Desde nuestras raíces el ser humano tiene algo llamado capacidad de asombro, y esta capacidad es lo que mantiene nuestra atención activada. Incluso, estudios demuestran que solo puedes tener 15 minutos de #atención sostenida. Entonces, no te preocupes si luego de 20 minutos ya sientes que no deseas continuar. Es importante que veamos esto como algo normal, para así poder avanzar al siguiente paso que es la ejecución de #estrategias para ser #productivo.

En mi experiencia personal (y sucede mucho últimamente), me pasa que debo cumplir con plazos de entregas, y entonces me siento a desarrollar las tareas necesarias para cumplir con dichas entregas y al cabo de un rato no deseo continuar más. En un comienzo, sentía que tal vez no me gustaba lo que hacía, luego me di cuenta que estaba equivocada, sí me gusta porque sino no abriría el ordenador y me sentaría a hacerlo todos los días o casi todos. Así que, al cabo de un tiempo, fui identificando aquellas estrategias que me hacían volver a focalizar mi atención por otro rato en lo que hacía, y ¡wow! Empezaron a terminar los días y vi todo lo que había avanzado.

Te compartiré lo que a mi me ha servido porque tal vez te sirva a ti también, sin embargo, te invito a que explores también dentro de tu #motivación propia, pues cada uno somos un mundo diferente.

1.    Espacios de hacer algo diferente: es importante que cuando sientas que no quieres seguir realizando la actividad actual en la que te encuentras, cambies por un rato de actividad, 20 o 30min, date el espacio de ir a consentir a tu perro o de empezar a ver un capitulo de una serie. Esto hará que tu cerebro descanse de la demanda actual a la que lo estás sometiendo y ayudará a que sientas al rato ganas de retomar.

2.    Toma agua y levántate: es importante que te levantes del sitio donde estás, muchas veces nuestro cuerpo y mente se cansan de estar en una misma posición tanto tiempo, más porque llevas mirando la misma pantalla durante x número de minutos. Regálate un momento para mirar a tu alrededor y tomar algo de agua.

3.    Socializa: Además de seres que se cansan, también somos seres sociales, no obvies y no digas que no necesitas de nadie, incluso el más ermitaño necesita salir y hablar con alguien para comprar comida; y si eres sociable, mejor, no tendrás problema en ir y hablar con alguien ya sea por chat o en persona (como un vecino o tu pareja). Esto liberará un neurotransmisor llamado dopamina, sí, el mismo que podríamos activar haciendo meditación y ejercicio, este también se libera con actividades sociales. Claro, no extiendas gran tiempo en ello, pero regálate otros minutos para esto.

4.    Hábitos saludables: Esto es de lo más común y lo debes haber leído muchas veces, pero sí, es porque es real e importante. En mi caso hago ejercicio día por medio y los días que lo hago mi estado de ánimo mejora y tengo más motivación. Igual que una higiene de sueño adecuada, puede ayudarte a tener más energía al día siguiente (higiene del sueño hace referencia a que tengas una rutina para acostarte, la mía es: me baño, me cepillo los dientes, me pongo pijama, hago una revisión por ultima vez de mis redes, dejó el celular sin volverlo a tomar, alisto las cosas que necesito para mañana empezar el día, tomo agua y me acuesto).

Un consejo importante para todo lo anterior es que te dispongas a en ninguno de estos momentos pensar en lo que estás haciendo de tu trabajo y/o estudio. Insisto en esta expresión: Regálate esos momentos, son importantes para que tu mente y cuerpo descansen un poco de las demandas cognitivas que tienen las tareas que desarrollas. Verás como la motivación vuelve a aparecer cada vez más fácil cuando las retomas.

Te quería compartir esto y espero que te sea de mucha utilidad. No olvides seguirme en mis redes sociales: