LÍDERES QUE INSPIRAN

Sin importar en qué negocio estés, sin importar el entorno o el mercado en que te encuentres… todo se trata de las personas, de la energía que invierten en lo que hacen, de la pasión por su labor, de su contribución consciente al logro de los objetivos.  

Por ello como líder además de conocer bien tu negocio y manejar hábilmente los temas administrativos, tu principal responsabilidad es inspirar a tu equipo con tus acciones y tu ejemplo, demostrándoles diariamente que lo que hacen es importante y hace parte de una gran meta común.  

Uno de mis mentores me enseñó que la potencia que tiene el líder que desarrolla, es que saca lo mejor que hay en cada persona, ayudándoles a ver y reconocer en sí mismos fortalezas que a veces ni siquiera sabían que tenían dentro, guiándolos para creer en su poder para hacer un mundo diferente desde donde quiera que estén. 

Pequeñas acciones muestran que eres un líder centrado en las personas, aquí algunas recomendaciones:  

1. Empieza por conocerlos: cuando conoces al equipo, sus pasiones, dolores, alegrías, preocupaciones, sus metas, retos, habilidades, fortalezas y debilidades, tienes la gran oportunidad de participar activamente no solo de su desarrollo laboral, sino también de su realización personal. Si los conoces podrás entender su realidad y aprender cómo desde tu rol de liderazgo puedes contribuir a su bienestar.  
2. Mantén conversaciones de valor: dedica tiempo de tu día a conversar, enseñar y escuchar a tu equipo, muéstrales con acciones que eres una persona en la que se puede confiar, cumple tu palabra y trata de ser un líder disponible para tu equipo, presente, no ausente.  
3. Empodera a tus colaboradores: guiar desde el empoderamiento. Dice un adagio popular: “Ni tanto que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre”. Si bien es contraproducente tener equipos dependientes en todo momento del líder, ya que esto genera sobrecarga laboral, afecta los procesos y frena su desarrollo; también está mal delegar funciones o responsabilidades sin el acompañamiento necesario. Lo mejor es guiar con preguntas, enseñarles a analizar, repensar, cuestionar y desarrollar en ellos la habilidad de encontrar soluciones ante los diferentes retos de la labor diaria.  

Dicen por ahí que cuando las personas se sienten amadas tienen un brillo diferente, pasa igual con los colaboradores: cuando se sienten cuidados, respetados, reconocidos y respaldados por su líder y su equipo, muestran un brillo diferente, mantienen un desempeño superior y sus resultados son extraordinarios.  

Te invito a dar el primer paso para conocer a tu equipo, es el inicio para honrar la oportunidad de oro que tienes en las manos: liderar personas. Feliz primer paso estimado líder. 

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