La administración Antifrágil
Los sistemas administrativos han sido diseñados para que sean robustos y resistan los embates de la realidad cambiante. Para ello se han desarrollado métodos para controlar, planificar, adivinar el futuro, gestionar el riesgo porque de ello depende el éxito empresarial. ¿qué ha producido ese proceder? todo lo contrario a lo que necesitan las empresas de hoy para tener éxito. Robusto es lo contrario a frágil, no obstante son más parecidos de lo que a simple vista parece. Lo frágil hay que resguardarlo, protegerlo, no someterlo a estertores, ni a situaciones imprevistas fuera de control para así resguardar su integridad. Ante el rótulo FRÁGIL, como nos comportamos, seguramente con mucho cuidado. Ahora bien ante el rótulo ROBUSTO, posiblemente nos comportamos con descuido, porque cualquier presión, cambio, estertores, imprevisibilidad, no lo afecta, haciendo que permanezca intacto, inmutable, inalterables, pero incapaz de cambiar y evolucionar, sucediendo lo mismo con lo frágil, porque al proteger lo frágil no cambia, permanece intacto, no evoluciona, ni se desarrolla. ¿Y qué es Antifrágil? No es lo contrario a frágil, ni a robusto. Podríamos decir que antifrágil es resiliencia, pero no la resiliencia como propiedad de los metales que les permite volver a su estado de equilibrio una vez perdido por una presión externa, sino a una situación mejor que la perdida. Entonces podemos decir que Antifrágil es "resiliencia aumentada". Este aumento le da a la antifragilidad el poder de crecer y desarrollarse, al tener la capacidad adaptación evolutiva mediante la disrupción, la creatividad y la innovación. En otras palabras lo Antifrágil vive plenamente en ambientes de cambio impredecible sometida a estertores, en ambientes caóticos, volátiles, azarosos e imposibles de prever, planificar y controlar. Así entonces es la ciencia administrativa del siglo XXI, que en posteriores entregas iré desarrollando.