La Atención es el Activo

Steve Rubel, un experto en relaciones públicas de la ciudad de Nueva York, dice que la atención es el activo más importante que alguien puede dar a un negocio, y que la atención vale más que los ingresos o las posesiones. En una era de información, casi todos los conocimientos del mundo están disponibles de inmediato en las computadoras que guardamos en nuestros bolsillos, la inmensidad de lo que está disponible para aprender, leer, escuchar o mirar provoca una escasez de atención. Todos los negocios en todas partes quieren una parte de esta atención, tanto en línea como fuera de ella. 

La nueva “atención como divisa” puede provenir de cómo ha cambiado el mundo desde la revolución industrial, que llevó a los vendedores a hacer todas las reglas. Ahora los compradores dictan lo que quieren, cómo lo quieren y cuándo. Y si no están satisfechos con un vendedor, simplemente se conectan a Internet y publican su descontento, a veces con un alcance mayor que el del vendedor. 

Nuestras propias mentes no siempre están enfocadas en nuestras tareas actuales y pueden divagar gran parte del tiempo. Si nosotros mismos rara vez prestamos toda la atención a lo que hacemos, ¿cómo puede una empresa esperar llamar la atención el tiempo suficiente para convertir a una persona en un cliente? ¿O incluso hacer que esa persona simplemente se dé cuenta de su propuesta? 

En otras palabras, ¿cómo pueden las empresas de una, que operan con la idea de que menos puede ser mejor, captar la atención necesaria para obtener ganancias y prosperar? 

En una entrevista que Sally Hogshead hizo con Marie Forleo, se habló sobre la tendencia de las grandes empresas a ser el helado de vainilla de su mercado: proyectan una personalidad que es universalmente aceptable, pero insípida. 

Ser vainilla no permitirá que vos o tu trabajo se destaquen. Las empresas de uno tienen que ser el helado de pistacho de su mercado. Para bien o para mal, a la gente le encanta el pistacho o no puede soportar su sabor y su extraño color verde. Para sus fieles seguidores, el helado de pistacho se destaca, exige atención y cobra una prima. Así es como se llama la atención mediante el uso y la presentación de la personalidad, no rehuyéndola. 

La fascinación es la respuesta cuando tomas lo que te hace interesante, único, peculiar y diferente, y lo comunicas. Cuando comiences a comprender cómo el mundo ve su negocio, podes ampliar esa comprensión presentando los rasgos específicos que te hacen a vos, vos. Cuando posees y aprovechas aspectos de tu personalidad estratégicamente, podes usarlos como una ventaja competitiva en un mercado abarrotado, como un cono de helado artesanal de pistacho por el que la gente pagará gustosamente $10 (en lugar de optar por el cono de vainilla de $4). 

No te limites a pedir a los consumidores que presten atención a tu negocio. En su lugar, comenza a hacer el tipo de cosas únicas e inusuales que llamen la atención para que tu negocio sea distinto. Para construir y mantener tu marca personal, cuanto antes aprendas a distinguir el perfil de tu empresa de manera positiva, antes podrás encontrar tu audiencia precisa y mantener tu negocio. Debes ser más consciente de quién sos y luego resaltar estratégicamente los aspectos innatos y únicos de tu personalidad para garantizar que tu negocio genere y mantenga la atención de tus clientes. 

Gracias por leerme hasta acá. Saludos. 

Gaston.