LA CULTURA CORPORATIVA EN LA JAULA Raúl F. López F.

Con base en experimentos reales con primates, realizados por G.R. Stephenson y Wolfgang Köhle se ha generalizado la narración de una fábula difundida desde hace unas tres décadas por comunicación oral y en algunos artículos de revistas especializadas, unas en psicología, otras en comportamiento social y, muy especialmente, en cultura corporativa. La psicóloga Marta Guerri la menciona y analiza en uno de sus libros.

Por el hecho de tratarse de un fábula de la que han aparecido muchas versiones, la siguiente es la mía, que sin alejarme del sentido general original la presento de manera tal, que me permita concluir en mis opiniones sobre la importancia de los temas que quiero resaltar y dejar lección. Ahí va mi adaptación:

Con el fin de estudiar el comportamiento colectivo de los monos y de la forma como se comunican entre sí, un grupo de investigadores resuelven encerrar en una jaula, situada en un sitio aislado y lejano de otros animales de su especie, a dos gorilas.

En la parte alta de la jaula colocan, sujetado de uno de los extremos de una cuerda, un delicioso y provocativo racimo lleno de bananos maduros.

El otro extremo de la cuerda está amarrado a un recipiente, que permanece oculto en el techo de la jaula. Dicho recipiente está lleno de agua fría y de troncos de hielo.

Todo, está tan bien diseñado para los propósitos del experimento, de manera tal que, al más ligero contacto con el racimo, con una siquiera de las frutas, el recipiente girará noventa grados y todo su contenido caerá sobre quien haya tocado siquiera una de las provocativas frutas.

Debajo de los apetitosos plátanos colocan los investigadores una escalera que llega justo hasta el punto en donde se encuentra el gustoso manjar.

Una vez los investigadores encierran a los dos animales en la jaula, ambos se percatan de la presencia de los plátanos y, sin dudarlo, uno de los dos se lanza a subir por la escalera para tomar uno.

El resultado es un baño con agua absolutamente helada, que no solamente asombra al animal, sino que lo deja temblando por causa de un frio sorpresivo y aterrador.

Las deliciosas frutas permanecen en lo alto de la jaula y a diario son repuestas por unas más frescas y llamativas.

Mas, lo sorprendente, jamás ni el gorila afectado ni su compañero tocan para nada las tentadoras frutas y miran con desdén a la tramposa escalera.  

Transcurridos quince días es retirado de la jaula el mono que sufrió el paralizante baño y es reemplazado por otro que se encontraba aislado lejos de la jaula, su compañero permanece dentro de ella.

Ninguno de los dos animales toca, ni mira siquiera, los llamativos bananos pese a que son repuestos a diario y así pasan otros quince días; al cabo de los cuales es retirado el animal que fue testigo del frío incidente y remplazado por otro que provenía del mismo lugar lejano.

Ahora los dos animales presentes en la jaula no padecieron del chapuzón, pero también desprecian el delicioso manjar. Quince días después se realiza un nuevo cambio y el comportamiento continúa, las deliciosas frutas continúan ignoradas.

Solo después de la quinta generación aparece un nuevo gorila arriesgado.

Nada más comparable a esta fábula que el comportamiento colectivo humano cuando se pertenece a una entidad, empresa o conglomerado.

Reflexiones:

1.      La cultura corporativa es la suma de comportamientos en el interior de una organización con un origen individual que se trasmite entre quienes llegan de forma multicomunicacional (término no castizo que me doy la licencia de utilizar porque resulta descriptivo del tema) .

2.      La mayoría de las veces los comportamientos de cultura corporativa no son objeto de un racional definido.

3.      La cultura corporativa se convierte en la impronta que da reconocimiento y autenticidad a la entidad.

4.      La cultura corporativa es un componente indeleble de la imagen de marca.

5.      De la cultura corporativa se derivan los patrones que definen los valores empresariales.

6.      Los comportamientos corporativos se convierten en un dogma empresarial sin que necesariamente se conozca su origen.

7.      Los chismes de pasillo en el interior de las empresas suelen tener más efecto que los artículos definidos en un reglamento interno.

8.      La cultura corporativa tiende a ser perdurable en el tiempo a lo largo de varias generaciones.

9.      Un cambio de cultura corporativa toma un tiempo prolongado en modificarse y tiene que ser objeto de un riguroso ejemplo y de una comunicación interna Multicomunicacional.

10.  La psicología colectiva conlleva, por intercomunicación, a un temor inusitado al cambio.

11.  El espíritu colectivo rechaza el riesgo individual, es preferible privarse de conquistas victoriosas.

12.  La cultura corporativa puede convertirse en un freno de mano para el progreso empresarial, puesto que muchas veces se basa en paradigmas  o en creencias arcaicas.

13.  Los seres humanos al igual que nuestros primitivos, los primates, obedecemos a normas sin saber por qué, solo porque lo hacen los demás.

14.  El miedo al cambio paraliza a las organizaciones.

15.  Un miembro de equipo con un precepto negativo puede detener la capacidad innovadora y de riesgo y por consiguiente el progreso durante años.   

Con todo lo anterior, la cultura corporativa es un componente definitivo para una organización, que debe ser revisado y analizado a profundidad, bien para mantenerlo como principio primario, para corregirlo, para ajustarlo, para actualizarlo o para sustituirlo.