La Derrota o El Fracaso
Como emprendedor y consultor de empresas, habiendo trabajado de la mano de varios líderes y equipos de trabajo, estando cerca de tantos seres humanos, habiendo establecido relaciones de confianza, siempre sale la conversación sobre el fracaso o un fracaso. Es un temor bien común, nadie comienza su negocio, o toma decisiones, deliberadamente queriendo fracasar, todo lo contrario, nuestra labor, es conducir a nuestros equipos hacia una visión articulada, clara y ética, que no sólo permita que todos crezcan economicamente, sino también como ejecutivos.
No importa que tan buenos seamos liderando equipos, o tomando decisiones, somos seres humanos, cometeremos errores, guiaremos a nuestros equipos por caminos incorrectos, que causaran dolor y desaliento, especialmente a los que tomamos la decisión incorrecta.
En otras ocaciones, aunque hayamos hecho nuestra tarea, la vida, el mercado, como querrramos llamarle, se pondrá entre nosotros y nuestros intereses. Este desafio, definirá a los emprendedores, lideres, directores exitosos, será la piedra de toque, el saber sobrellevar la frustración, la ansiedad, la guerra interior que produce esta aparente injusticia, definirá al quién permanecerá en el mercado y quién lo abandonará.
Personalmente he encontrado respuestas para los retos de esta dura época en el arte y la literatura, el lenguaje poetico dice cosas con imágenes y metáforas, que pueden servir como bálsamo para perseverar y aprender, para sacar las lecciones que dejan los tiempos difíciles. Comparto una aproximación a la derrota de Khalil Gibran:
Derrota, mi Derrota, mi soledad y mi aislamiento. Eres para mí más querida que un millar de triunfos, y más dulce a mi corazón que toda la gloria del mundo.
Derrota, mi Derrota, mi conocimiento de mí mismo y mi desafío; por ti sé que aún soy joven y de pies ligeros, y desdeñoso de los laureles que se marchitan. Y en ti encontré la soledad,y la alegría de ser ignorado y despreciado
Derrota, mi Derrota, mi espada brillante y mi escudo; en tus ojos he leído que ser entronizado es ser esclavizado, y ser comprendido es ser rebajado, y ser entendido significa alcanzar la plenitud, y como un fruto maduro, caer y ser devorado.
Derrota, mi Derrota, mi audaz compañera, tú escucharás mis cantos, mis gritos y silencios, y nadie sino tú me hablará de batir las alas, y de la agitación de los mares,y de las montañas que arden de noche, y sólo tú escalarás las rocas y peñascos de mi alma.
Derrota, mi Derrota, valor que nunca muere; tú y yo reiremos juntos en la tempestad, y juntos cavaremos las tumbas para todo lo que muere en nosotros, y permaneceremos de pie al sol con una voluntad indomable. Y seremos peligrosos.
Creo que hay mucho que aprender