La Empresa Mexicana que se hizo Mundial Vendiendo Pan
Las empresas grandes vienen de pequeñas oportunidades que son aprovechadas por los más visionarios. Esto es lo que sucedió con Lorenzo Servitje, que si eres de México seguro sabes quien es y si no lo sabes, te lo platicaré en las siguientes líneas.
La Familia Servitje
La familia Servitje, empresarios de origen catalán. Era una de las empresas panificadoras más importantes de esos tiempos, a tal punto de posicionarse en diferentes sitios, allá en España.
El grupo de pequeñas franquicias crecía y de la mano de esto las diferencias, es por ello que, Juan Servitje, padre de Lorenzo y Roberto quienes llevarían su empresa a lo más grande, decidió deslindarse de la familia y abrir su propia panadería en México.
El Molino
El Molino se fundó en 1928 y todo marchaba bien, hasta que, 8 años más tarde, en 1936, el dueño y fundador del Molino fallecería, dejando atrás a su familia y su empresa. Lorenzo el hermano mayor con 18 años, tomó una importante decisión. Hacerse cargo del negocio familiar y continuar con el proyecto de su padre.
El Crecimiento
Lorenzo siempre había sido muy bueno para los negocios, antes de tomar el control de la panadería, ya se le notaba con un gran potencial ayudando a su padre. Fueron unos buenos años los primeros que mantuvo al mando de la empresa, pero Lorenzo quería más, y vio una gran oportunidad en una industria que venía creciendo.
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El Nacimiento de Bimbo
El pan de Molde o Pan de caja estaba teniendo mucho éxito en otros países, y para el México de ese entonces se volvía casi imposible conseguirlo, es cuando Lorenzo junto con sus socios se da cuenta de esta oportunidad y decide industrializarse para convertirse en únicos fabricadores y distribuidores de este producto, en México. En 1945 se fundó Bimbo. El Molino les había traído muchos aprendizajes, socios y dominio en su sector, y llegaba el momento de consolidarse.
Los Grandes No van Solos
Se habla mucho de un solo representante, pero la realidad es que el proyecto de Bimbo inicia con muchas personas, 34 colaboradores y 10 camiones que distribuían 14 productos. Hay que señalar precisamente esto, que los grandes proyectos inician con pequeñas ideas, pero con grandes equipos.
No es la cantidad de las personas, es la calidad del liderazgo.
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Ram Chávez