La evolución natural de la Democracia
Ya existe tecnología que puede ayudarnos a tener una mejor Democracia.

La evolución natural de la Democracia

#Futturnauta,

¿Te has dado cuenta que la tecnología ha impactado en muchísimos ámbitos de tu vida y de nuestra sociedad?

Pero hay uno en el que no ha impactado, o lo ha hecho muy poco. Es un ámbito del ser humano y de la sociedad en la que la tecnología no ha producido cambios significativos aún.

Quizás es bueno que en este reducto de pura humanidad no se produzcan cambios, o quizás es justo lo que necesitamos para que nuestra sociedad humana pueda realmente avanzar a un nuevo estadio de la humanidad. 

Te hablo de la POLÍTICA.

Hoy en día, el mundo (con sus diferencias, particularidades y limitaciones), sigue el sistema político que creció y se forjo en la antigua Grecia. La Democracia.

Podríamos disertar sobre muchos sistemas políticos y los parabienes y debilidades de cada uno, pero se nos resulta que la Democracia es el mejor sistema político conocido por el ser humano, al menos hasta la aparición de uno mejor.

Sin embargo, la política de hoy en día no se ha visto afectada por la tecnología como otras áreas de la sociedad humana. Y aun pudiéndonos preguntar ¿a qué se debe esto?, creo mas interesante reflexionar sobre cómo la tecnología podría mejorar la democracia que hoy conocemos.

TECNOLOGIA EN LA DEMOCRACIA

No quiero extenderme, sobre cómo hemos utilizado la tecnología en la política, pero mas allá de buscar formas nuevas de votar, la cosa no tiene mucho recorrido.

Claro que podemos pensar en llevar chips bajo la piel que nos identifiquen y nos permitan votar el día de las elecciones. O disponer de sistemas de encriptación “inviolables” que garanticen que mi voto es mío, estando en casa o a miles de kilómetros de esta.

Es mas, podríamos acelerar el "recuento de votos" y tener los resultados a las 0,1 décimas de segundo después de cerrar urnas. Poner drones a disposición de personas ancianas, en ámbito rural, para que su voto sea llevado desde la granja al colegio electoral con total seguridad y anonimato, cuando Internet no llega a rincones recónditos. Hasta un simple NFC nos podría ayudar a votar, o lo podríamos complicar mucho haciendo que el botón del candidato deseado, fuera capaz de identificarnos extrayendo sangre y leyendo nuestra secuencia genética. Y no te hablo del blockchain porque de esto ya te han hablado hasta la saciedad.

Pero todos estos usos de tecnologías no aplican un cambio en el “modelo democrático”, solo afianzan el modelo de hace 2000 años, añadiendo sencillez y rapidez, pero nada mas. No hay adaptación a las nuevas necesidades y realidades del ciudadano de hoy.

Nos hemos acostumbrado a cambiar "modelos de negocio" usando la innovación y la disrupción tecnológica, pero no lo hemos hecho en el modelo de democracia que nos gobierna. ¿A qué obedece esto?

Nuestro principal problema es que el mundo se mueve en tiempos, formas de pensar, concepciones y visiones que no tienen nada que ver con lo que la política hoy entiende y quiere entender.

Mi interés por la Democracia Líquida empezó en el día que escuche, como invertían los partidos políticos y nosotros, los ciudadanos, cantidades ingentes de tiempo y otros recursos para que se elijan representantes políticos, que serán tu “voz” ante los distintos estamentos de gobierno de nuestro país, representando nuestros intereses e ideales, pero que curiosamente, desde el mismo momento en que se les da el voto, se pierde "absolutamente" el control sobre dichos representantes.

Es decir, que ente 4 a 7 años estarán campando a sus anchas y haciendo aquello que han prometido, o adaptándose a las circunstancias, o pactando donde dijeron de no pactar, o quizás (como humanos que son) pensando en lo mejor para su futuro personal o frustrándose por la incapacidad de poder cumplir con sus promesas al encontrarse las dificultades constantes del entramado político actual. Y si ocurren circunstancias excepcionales (hablo de pandemias, guerras, crisis energéticas o caídas globales de la economía), durante el periodo de tiempo que han sido elegidos, no tienes manera a decirles que quieres, aunque ellos hablen de encuestas, sondeos, la voz del ciudadano y otros.

Y no entro en la valoración que la sociedad de hoy tiene sobre los políticos. No creo que estés en desacuerdo conmigo, si te digo que cada vez nos sentimos mas alejados de la clase política. Manipulación, sectarismo, intereses partidistas e ideológicos, corrupción, miopía ciudadana, tergiversaciones, prioridades no prioritarias y otras lindezas, las encontramos en los medios de comunicación un día si y otro también.

Esta disociación entre el ciudadano y la política es palpable y creciente desde al menos dos décadas atrás. Seguro que más.

No busques fantasmas, que te lleven a pensar en que son personas de moral dudosa, o que el sistema político, por definición es corrupto (en la mas amplia acepción de la palabra) o cualquier otra idea negativa sobre los políticos y el sistema político.

Es algo más simple y sencillo.

¿Y si el sistema de elegir representantes, dentro de una democracia, ya no es un sistema valido en la sociedad tecnificada y evolucionada actual? … ¿y lo que antes en 4 años era un tiempo razonable para ser ejecutado, ahora ha de serlo en meses o días?

¿Cómo podemos hacer para que nuestra opinión se vea representada de verdad para cada situación, en el momento exacto en que se tenga que dar?

DEMOCRACIA DIRECTA

A poco que hayas estudiado algo de política o de historia, tendrás dos palabras en tu mente “democracia directa”. O lo que es lo mismo, que cada ciudadano vote cada ley, resolución, norma, decreto y … que se promuevan o no en función del numero de votos alcanzado. Tanto a nivel europeo, como de País, Comunidad o Región y Ayuntamiento.

Bonito, ideal, y …. muy irreal. Y en este caso no es por la tecnología. No es la culpable de que no tengamos democracia directa aún.

Solo necesitaríamos una App en el móvil, que este cifrada, donde nos preguntaran que votamos para la proposición de ley nº …. y apretar el botón del SI o del NO.

Esta tecnología ya esta disponible y no es ciencia ficción pensar que podríamos usarla para votar de forma directa. Sin embargo, todo esto tiene un pequeño problema. 

No se vota una ley al año, ni una resolución al mes, o una norma por semana. Hay miles y miles de ellas que votar, y cada una lleva un tiempo prepararlas, pero también tiempo analizarlas y tomar decisión sobre la postura que queremos adoptar. Esa es la razón principal por la que existen representantes políticos. Para que dediquen su tiempo, en nuestro nombre, para hacer que la democracia funcione.

¿Realmente tienes tiempo para poder votar más de 7 veces al día/semana?, … no hablo de apretar un botón, ... hablo de leer, entender, contrastar, analizar, decidir y votar en consecuencia.

Yo estoy seguro que no lo tienes. Ni siquiera para una votación por semana.

Es nuestra falta de tiempo, o conocimiento o interés o simplemente nuestras prioridades, la que impide la “democracia directa”. Esta en nuestra idiosincracia humana, queremos gobernarnos, pero no invertir tiempo/esfuerzos en ello.

¿Qué dilema?, ¿verdad?

Necesitamos personas que gestionen por nosotros nuestra forma de gobernarnos, pero sentimos que no tenemos ningún control sobre ellos, ni que recogen nuestras sensibilidades e ideas según la ocasión o el interés, ya que nadie es blanco o negro durante toda su vida o en todos los temas que le afectan.

Quizás seas muy conservador en lo que al divorcio se refiere, pero sin embargo en temas de inmigración eres extremadamente liberal. Sin embargo, el tiempo y tus experiencias pueden hacer que cambies con el tiempo. ¿Cómo ajustar eso con el sistema de partidos políticos y representantes políticos actual que predomina en el mundo?

¿DE VERDAD QUÉ LA TECNOLOGÍA PODRIA SOLUCIONAR ESTO?

Te invito a que reflexionemos juntos.

¿Qué ocurriría, si pudieses tener una tecnología que permitiese recoger todas las noticias y datos del mundo, de todas las fuentes y orientaciones políticas, creencias y visiones y te permitiera enseñártela de forma contrastada para que tu pudieras entender realmente lo que pasa, pudiendo tener una visión muy amplia de la información y así tomar tu propia opinión sobre ellas?

Si esta mágica tecnología existiese, tendrías la posibilidad no solo de estar informado de forma nada sesgada, sino que tendrías la información en tiempo real, para tomar tus decisiones.

Ahora imagínate, que existiese otra tecnología. Una que puedes indicarle, quien eres, que tendencias personales y políticas tienes, que piensas sobre muchos temas humanos (divorcio, educación, economía, inmigración, …) y que pudiera ayudarte a analizar los cientos de normas, leyes, decretos, … que cada día se ponen en marcha, y que junto con tu forma de ser y pensar y la información que tu has recogido y entendido, te pudiera enseñar la información que tu necesitas para tomar una decisión sobre que votar en la próxima ley/norma/decreto/... . Y que en una sola pantalla y de un vistazo, tuvieras todo aquello que necesitas para comprender que es lo que estas votando, como te afecta y permitirte pulsar el botón del SI o el NO según tu libre albedrío.

¿Te gustaría tener este asistente a tu disposición?

Y además, ¿qué te parecería que pudieras cambiar y modificar este asistente, según tus creencias, convicciones, y experiencias fuesen cambiando, para que pudiera indicarte que es lo que te conviene votar en cada momento de tu vida?

Otra mágica tecnología que te ayudaría a poder ser un ciudadano que puede ejercer su derecho al voto directo (democracia directa) y hacerlo de forma responsable, sincera y en el momento adecuado, y pudiendo seguir tu vida cotidiana.

Si esta tecnología existiera, podrías seguir con tu día a día y votar 7, 8, 15 y 20 veces al día. Si no te lo crees, mira cuantas veces miras tus redes sociales, WhatsApp u otros al día.

¿UTOPÍA?

¿Realmente crees que esto que te planteo es una utopía, o hay algo dentro de ti que te dice ,que lo mismo, es posible?

Quizás no hoy, ni el año que viene. Quizás no tengamos toda la tecnología lista de una vez y habrá que desarrollarla por fases, … pero ¿No crees que es posible que exista?

¿Y si te digo que ya existe o, al menos, una parte de ella?

Lo llaman Inteligencia Artificial.

Lo llamo un “yo digital”. No es un yo que quiero que haga por mi lo que yo no tengo tiempo de hacer. Si fuera eso, solo cambiaríamos los representantes políticos de carne y hueso que hoy nos representan, por otros virtuales. No habríamos avanzado nada.

Hablo de un “yo digital” que sea como nosotros y que piense por nosotros, de acuerdo a nuestras propias “reglas” sobre cada tema a votar y que me diga por qué debería votar SI o NO, en base a como soy, mostrándome los botones para que yo tenga siempre la ultima elección. Hablo de una extensión de mi inteligencia que piensa como yo, pero que se dedica solo a mis tareas democráticas. Un segundo cerebro dedicado solo a mí ser democrático.

A esto se le llama Democracia Líquida. Un tipo de democracia que no solo permite la democracia directa, sino que permite que todo fluya de una forma mucho mas rápida a la actual. Y lo que es mas importante, mucho mas acorde a como pensamos con respecto a cada tema.

De esta forma, ya no habría representantes políticos humanos tal y como los conocemos hoy en día. Sino que tendríamos, personas que ejercerían el gobierno. Su función seria entender el contexto y las necesidades del ciudadano y propondrían ideas, planes, proyectos, que nosotros juzgaríamos con nuestro vota. Y una vez aceptado, estos mismos lo llevarían adelante.

Esto convertirá al político en un gestor, en un profesional de gestión de los deseos y ordenes del ciudadano. Esto dejaría atrás al político dedicado por y para la política y su propio futuro, y potenciaría al gestor, al que es capaz de hacer las cosas bien y como se lo hemos pedido. Potenciaría la meritocracia. De forma que solo seguirían siendo gestores si lo hacen bien. Seria un cambio de foco, ¿no crees?

Además, veo improbable que alguien pueda ser gestor en un gobierno nacional o local, sino no ha adquirido experiencia previa de gestión en otros entornos privados. Y esto llevaría a tener en los gobiernos a los “realmente buenos”, ya que serian votados por ello, por hacer las cosas bien y mientras las hicieran bien.

Adiós a los representantes políticos y hola a los gestores y líderes.

Es posible que conceptos como político, partido político, ideología, intereses partidistas y otros, desaparecieran de la faz de la tierra, quedándose solo en los libros de historia. Ya que se potenciaría la idea del gobierno directo y de la meritocracia. Hasta podríamos llegar a la excelencia, permitiendo que cualquier ciudadano pudiera proponer ideas y leyes y ser votado por todos y ejecutadas por los gestores.

¿EMPEZAMOS YA?

Futturnauta, no corras tanto.

Si llevamos mas de 2000 años intentando perfeccionar el concepto de Democracia, no creas que esto que te planteo se puede hacer de la noche a la mañana, aun cuando toda la tecnología estuviera ya disponible.

Hay temas en los que trabajar y profundizar.

Por ejemplo, la tecnología.

Hemos de terminar de conseguir toda la tech stack (la pila de tecnologías) que son necesarias para permitir este nuevo estado de Democracia. Esto llevara años, y se ira implementando año a año en las próximas décadas. Tengo colegas que hablan de que nuestros hijos podrán disfrutar de entre un 30% a un 50% de estas tecnologías aplicadas a la democracia, pero que pasara entre medio y un siglo para que toda la tecnología este disponible y “afinada” para que permita esta democracia líquida.

Pero también, hay que avanzar en el sentimiento Democrático.

Mas importante para mí, que la tecnología, es que a las personas hay que dirigirlas en este sentido de la democracia, hay que hacer que poco a poco abracen su responsabilidad democrática y su participación. Mucho mas allá de lo que ahora ocurre y/o hacen o sienten.

Y que demanden mas democracia y tecnología que les ayuden a ser mejores y mas ciudadanos democráticos directos.

Y esto solo ocurre cuando se educan generaciones, no solo en el conocimiento y teoría de la democracia, sino que se les enseña a usarla, participarla y mejorarla. Cuando el sentimiento democrático dentro de un ser humano lo es tanto, sino mas, como el sentimiento que uno tiene por su equipo de futbol favorito, por su familia o su país, entonces tendremos la seguridad que la democracia es parte del ser de esa persona.

Y he dicho que es el mas importante, porque en el momento que una generación completa se convierta en una ferviente creyente de la democracia directa y responsable, todo se acelerará de forma exponencial. Por eso les digo a mis colegas que lo podremos conseguir mucho antes de un siglo.

El dialogo entre “yo’s” tiene que ser fomentado y duradero en el tiempo.

Porque superados los factores tecnológicos y humanos, pasamos a otro. El aprender a hablar con el “yo digital”.

Somos seres humanos, formados por sentimientos, emociones, experiencias, conocimiento, entorno y otros. Todos ellos nos modelan, limitan y expanden cada día. Nos cambian, si prefieres verlo así.

Eso significa que también cambiamos nuestra forma de pensar, o nuestra posición o pensamiento con respecto a temas o asuntos que afectan nuestra vida como persona y sociedad. Ese cambio ha de realizarse también en tu “yo digital” de forma que tu “yo” y tu “yo digital” sean el mismo.

Hay que decirle a la Inteligencia Artificial que has cambiado y esta debe de ajustarse para representar el nuevo yo y no dejarse llevar por lo que antes eras. Y esto ha de ser un dialogo constante y a lo largo de toda la vida.

Y por supuesto hay que vigilar y cuidar la Democracia.

Esa misma conversación de cada ciudadano con su ayudante digital en temas de democracia, ha de mantenerse entre los ciudadanos y el propio sistema en si.

Hoy disponemos de Tribunales Constitucionales que velan por el respeto del Acta Magna y en consecuencia de la democracia tal y como hemos decidido que sea.

Es este Tribunal Constitucional, o mejor dicho su sucesor evolucionado el que tendrá varias tareas.

Tareas como vigilar y/o desarrollar tecnología que impida que nada ni nadie pueda “hackear” este sistema líquido de democracia. O tareas como vigilar los sesgos que con el tiempo puedan aparecer en la Democracia Líquida, lo mismo que han aparecido a lo largo de décadas en los sistemas democráticos actuales. Incluso, defender los "neuroderechos" de cada ciudadano, para que su "yo digital" no sea ni "copiado", ni "manipulado", ni utilizado con fines políticos, comerciales o de otra índole, y que sea tratado con el mismo respeto que tratamos una vida humana en la Declaración de los Derechos Humanos.

No hay que olvidar que la Democracia es dinámica y que sufre desgastes, malas interpretaciones, usos indebidos o ineficiencias, intentos de manipulación o derrocamientos, entre otros, y que deben de ser corregidos y/o mejorados o evitados.


En fin, mi querid@ Futturnauta, como ves la tecnología puede ayudar a cambiar la política, puede terminar con el hartazgo que tenemos con los políticos actualmente. Forzara a los gobernantes a mejorar sus habilidades de gestión y nos puede llevar a un mundo, ya no lejano de democracia líquida, donde todo fluya según la velocidad y deseos de los ciudadanos.

Si crees que es un sueño, trocea en partes todo lo que te he contado y veras como una o varias partes son factibles desde ya. Y si piensas que tendremos mucha gente que se oponga a la democracia líquida, … déjame que te pregunte: ¿Cuándo has visto que una idea innovadora no haya tenido aguerridos oponentes?

Futturnauta en tus manos esta hacer un mundo mejor, un mundo más demócrata, … ¿qué puedes hacer para que conseguir una democracia mejor?

Que tengas un feliz y prospero día, Futturnauta.

Antonio Ramírez

Paloma Larroy

Desarrollo de negocio en el Caribe

4 años

Ojalá la tecnología a hacer democracias más fuertes y justas.

Inicia sesión para ver o añadir un comentario.

Más artículos de Antonio Ramírez

Otros usuarios han visto

Ver temas