La gente realmente no quiere emprender

INTRODUCCIÓN

Lo que usted va a leer, es mi forma de hablar. No soy escritor, no quiero ser escritor, tengo todos los errores habidos y por haber de ortografía, vocabulario y estructura. Lo que usted va a leer, no es lo que usted quiere encontrarse, es lo que no quiere que le digan. De todas formas, entérese que yo le quiero mucho, me interesa su opinión, su interacción, su apoyo, su crítica y sobre todo, que cuando termine de leer, me escriba al privado y me cuente su opinión, recuerde, yo me debo a usted querido lector, yo vivo de lo que usted haga después de leer este texto, por ende, merece lo mejor de mi, que está aquí en este texto, no tengo más, aquí lo acabo de dar todo, tome lo que le sirva y deje seguir lo que usted crea.

AHORA SÍ, MANOS A LA OBRA (busque crispetas y Coca Cola):

Lidero una compañía desde el año 2015 en la que fundamentalmente ayudamos a profesionales conectándolos a mejores retos laborales, acompañándolos y mejorando su marca personal, desde el speech hasta sus herramientas (hoja de vida, Linkedin y Ficha Técnica), y lo que más vendemos en su orden es: Servicios de Head Hunting y Executive Search a empresas (72% de la facturación), servicios de Acompañamiento en Transición Laboral (26%) y sólo el 2% alguna vez compra algún servicio o se interesa en soluciones para el emprendimiento.

Es supremamente curioso, pues, es fácil entender que un joven de menos de 30 años piense exclusivamente en empleo, pero ¿Los mayores de 40 o 50? ... entiendo perfectamente que les guste y prefieran el empleo, pero lo incomprensible es pretender vivir exclusivamente de estar empleados.

Emplearnos puede resultarnos excitante y lleno de aprendizaje, puede parecernos fantástico que cada quince días nos paguen y no ser nosotros los que paguemos, puede parecernos genial que otro nos pague la ARL, la salud, pensión y hasta vacaciones por 15 días una vez al año. Nos puede parecer fascinante aprender de otro "líder", que otro ponga el pecho y nosotros lo ponemos por lo que nos toca. Puede ser toda una experiencia trabajar para compañías multinacionales que piensa en nosotros y nos "regala" como plan de compensación emocional el año de gimnasio, telefonía, auxilio funerario (¡ay mi Dios!), tikets intercambiables, inclusive, medicina prepagada o parte de la pensión del colegio o universidad de nuestros hijos, todo eso puede parecernos enorme y fantástico, pero es que todo eso te lo puedes pagar tu solito, y nunca piensas en los contra.

Los contras son muchos, pero no te los va a decir la universidad, no te los van a decir en la maestría, ni te los menciona el colegio y probablemente tus papás o familiares no tocarán el tema aunque ellos ya saben lo que voy a decirte a continuación.

Vamos para viejos inevitablemente. La cédula se expidió y desde ese día tu fecha de cumpleaños empieza a agrandar el acumulado de días de vida que tienes, tus años de experiencia se agolpan en tu hoja de vida, empiezas a llenarte de cartones que pones en un cuadro o los guardas debajo del colchón y los escaneas para enviárselos adjunto a todo el que diga Recursos Humanos, Head Hunter, Reclutador, Gerente, RRHH, Recruiter, o cualquier otra derivación de estos, correos que cuando van sin sentido ni asunto claro, pasan a ese buzón cuyo "foquito verde" (sin leer) seguirá muchos días y meses, hasta que el lector, vea el asunto, y sin abrir el correo, le activa un checkbox junto con otros correos que tampoco le interesan y todos juntitos, se van al comando Papelera, Trash, Spam o "correo ya leído". La edad, problema más grande que físico o mental, es un problema que trae otros, y esos otros son los que definitivamente complican el capricho de querer ser empleados hasta la pensión.

La edad no va sola a las fiestas, viene con unos invitados desagradables, la experiencia mal llevada. Si eres de los que pasó los 35 años y todavía eres Auxiliar, Coordinador, Asistente, o esos títulos que no son nada "Ingeniero I", Consultor, "Profesional IV" o "Gestor de" te viene un problema de sobre perfilamiento, es decir, demasiada experiencia y edad, para competirle a uno de estos cargos. Si llegaste a los 40 años y no eres Director o Gerente (excepción de Gerente General, Gerente Regional, Vicepresidente o Presidente), entonces el problema sube a "Nivel Máximo", porque ahora eres más caro. La edad trae consigo a la experiencia y si la experiencia a los 40 no llegó al máximo nivel de tu carrera, empiezan a descartarte, sólo por eso, por "demasiada experiencia", y yo que no comparto ese punto de vista, lo entiendo. La empresa que no te llama, no es porque considere que no sirves, es porque quiere pagar por alguien más económico, y ese alguien es más joven, es decir, con menos edad (¡Ay la edad!).

La edad, también trae a otros compañeros, terquedad (no todos), menos energía (no todos) y además, trae ego, y el ego nos termina de pisotear, porque nos eleva a algo supremamente imaginario, nos empezamos a creer indispensables, exitosos y únicos (no todos), cosa que es más falsa como la tierra redonda, el contagio del SIDA, la Antártida o la construcción de las murallas egipcias con miles de esclavos, palos, poleas y que además, son tumbas (¡ay Dios!).

Si metemos todos estos problemas a una coctelera, en conjunto con los que uno no controla, como la recesión económica, valor del dólar, políticos, recursos no renovables, globalización, estandarización, transformación digital, industrialización, inteligencia artificial, tecnología, automatización, cambio de paradigmas, crisis, guerras mundiales, impuestos, corrupción, dedocracia (siempre la ha habido y la seguirá habiendo) y además, la explosión de la burbuja de la "certificaditis" y "maestríatitis" donde las universidades se llenaron los bolsillos generando un problema insostenible para toda la vida de miles y millones de personas que creyeron que por estudiar más, iba a ser más fácil conseguir empleo y ascensos; si todo esto lo metemos a un cóctel, el resultado no invita precisamente al entusiasmo de la búsqueda del "ingreso fijo", "empleo estable", "trabajo digno" o "empresa donde realmente sea feliz y espere por la pensión".

Querido lector, yo creo firmemente en el empleo, soy el Gerente de una empresa de más de 26 colaboradores en varias sedes en Colombia y América Latina, yo tengo más empresas donde tengo más empleados, inclusive, una de mis empresas le busca empleados a las empresas y nosotros ayudamos a más de 25.000 profesionales a conseguir empleo... el problema es que sólo quieras vivir de ser empleado, ese es el problema.

Venga que en ésta última parte te cuento eso que no te quieren decir, no lo anterior (que ya es bastante caliente y ácido). Aquí te va el listado de los "otros problemas" de querer sólo trabajar sin emprender nada:

1. Ningún empleo es para toda la vida, seas quien seas, seas familiar o palanqueado, seas el mejor trabajador del año o la década. Todo empleo se acaba, y entre más tarde (edad) se acabe, más difícil es volver a emplearte (por todo lo anteriormente descrito). Perderás el empleo porque tu renuncias, porque te retiran, porque la empresa entra en quiebra, porque la empresa crece tanto que ya no le pareces "muy anticuado", o porque llegó un nuevo jefe al que no le caes bien o "no hay feeling"y por "mutuo acuerdo" te dan el "ácido" (ha sido un placer).
2. La pensión se irá alejando, correrá tan rápido como tu edad, va a llegar inevitablemente el día (muy cerca) en que te pensionas y ya no puedes ni ir tu directamente a cobrarla.
3. Ningún salario es tan alto como lo que produce un negocio propio. Ninguno. Son tan bajos los salarios que toca darte comisiones, primas extra legales, bonos, horas extra, salario emocional, flexibilidad, productos "gratis", programa de beneficios y compensación y además te dan un uniforme para que no ensucies tu ropa. Es tan bajo lo que un empleo te genera en salario, que encima tienes a un jefe, a dos o a tres, ellos ganan más que tu, encima está una junta directiva a la que se le paga, una cantidad de cosas en las que la empresa se gasta el dinero, impuestos, renta, "renta presuntiva (¡ay Dios!), ICA y demás cosas, y aún así, ¿Adivina quiénes son los que más ganan?, los que ni ves, los que ni sabes quiénes son, los que emprendieron, los dueños de esa empresa. Los que no reciben bonos, primas, salario emocional ni nada. Los que no tienen ni la mitad de tus estudios, los que no tienen ni la mitad de tu experiencia laboral, los que no tienen excel avanzado, tampoco hablan bien inglés, no tienen tu oratoria, no hablan como tu, no son tan buenos como tu, no invierten tanto dinero en sus blazers y vestidos como tu, ellos, sí ellos, que a sus hijos les enseñan desde pequeñitos, que trabajen para aprender un rato y después de unos 3 añitos, vengan a trabajar y se sienten en su silla de miembro de la junta y monten más negocios, en ese momento, eliminar su hoja de vida.

No está mal que trabajes, pero... ¿Por qué no emprendes? ¿Quien te asustó tanto como para temerle a algo tan fácil, a algo que no depende de nadie más que de ti. ¿Por qué temerle a algo tan rentable? Yo sé que en la universidad nadie te enseñó a emprender, nadie te enseñó marketing digital (del de verdad), nadie te enseñó oratoria, a vender o a hacer networking, lo sé, pero es que tampoco te enseñaron a buscar empleo, tampoco te dijeron que no aprendiste nada, tampoco te contaron que toda esa "despejadera de x y y" no es la vida real, tampoco te dijeron que cada libro que te leíste, es aplicable sólo el 5%, tampoco te dijeron que te toca empezar por el salario mínimo, tampoco te dijeron que hay carreras profesionales que no tienen salida, tampoco te dijeron que los diplomados no sirven para nada, tampoco te dijeron que te están matando por dejarte hacer una especialización o maestría así no tengas experiencia laboral aún, no te lo dijeron porque sencillamente ellos son otra empresa que necesita facturar y además, ni ellos lo saben. No te dijeron.

Emprende, hazlo, es fácil, no temas. Sé que probablemente antes emprendiste y te fue mal, conoces a alguien que emprendió y le fue mal, a tus papás les fue mal con su emprendimiento, conoces compañeros que emprendieron y ganan menos que tu en tu empleo (hoy, aclaro, hoy). Lo que todos ellos (el amigo, el conoces, tus familiares y ese amigo de tu amigo que emprendió), todos sin excepción, todos ellos no emprendieron, todos ellos intentaron emprender, todos ellos cometieron el mismo error suicida: Sin dinero que soporte las pérdidas, se aventuraron a autoemplearse o invirtieron en una buena idea.

Las buenas ideas no necesariamente son buenos negocios, inclusive, hay ideas trilladas y super "perrateadas" que son buen negocio. Lo que necesitas hacer es embarcarte en un buen negocio, ese negocio tiene que depender sólo de ti (sin socios, o muy pocos), que inicie sin inversión inicial o muy poca (si hay, miles), y el secreto está (aunque no lo creas) en no renunciar al empleo que tienes. Si no tienes empleo, busca otro, empléate otra vez y ahí si emprende. El secreto es emprender mientras tienes un empleo. Seguro que será difícil, la energía no alcanza, el dinero no alcanza, seguro. Pero llegará un punto en que no te das ni cuenta, y ya vistes mejor, ya tienes una mejor camioneta, ya no debes tanto dinero, ya la compra quincenal no es de $300.000 sino de $700.000, ya no tienes el mismo relojito de hace 5 años, ya no andas comiendo lo mismo, ya no eres tan tacaño, ya las cosas que veías carísimas que nunca serían para ti, ya son muy alcanzables, ese día llega (mientras estás empleado y emprendiendo) en que tu jefe bruto y torpe te está regañando y miras en sus ojos y te quieres reír, ese día llega, sientes lástima por el, porque el sólo vive de eso, está viejo y si pierde ese empleo está frito, el y su familia (gánese el sueldo que se gane). Te va a llegar ese día en que empiezas a trabajar porque te gusta, no te enteras que día pagaron la quincena, se te olvida el "salario emocional", no te vas a los empleos por lo que pagan sino por lo que se aprende, empiezan a llamarte a ti a procesos de selección y tu les dices que "no tienes hoja de vida", que "no estás en Linkedin" e igual te llaman. Llega el día en que no hay candidatos, te llaman sólo a ti, no tienes que pasar por Suricatum, ni por el Head Hunter de turno, ni hacer un test Wartegg, no te ponen una prueba de excel avanzado, no te ponen una prueba de armar legos, no te toca reunirte con un reclutador que te pregunta: ¿Por qué quieres trabajar con nosotros? porque le dirías: "Es que tu jefe me llamó porque quiere contratarme", ese día llega, sólo ese día podrás decidir si quieres quedarte emprendiendo o trabajando, trabajando por gusto, porque te da la gana, estudias lo que te da la gana, por placer, por aprendizaje, no para que te den un aumento, no para ponerlo en tu hoja de vida. Ese día, en tu empleo, esperan a que llegues a la hora que te da la gana, probablemente te dan el "home office", ese día entenderás lo que es negociar tu salario. De esta gente, hay miles, y generalmente, estos (los que aman más estar empleados que emprendiendo), algún día también los despiden (¡ay la edad!), pero cuando eso pasa, miras la cara del encargado de darte la carta, y entenderás que lo que te dije en este blog, te iba a pasar, te vas y sigues creciendo, sigues generando ingresos, sencillamente dejó de entrar un salario que ni sabías cuanto es, y ese día, te pones a trabajar en tu propio negocio a tiempo completo, ese día tu empresa, deja de ser "tu negocíto" y se multiplica su crecimiento. Allá a tu hijo, cuando apenas vaya escoger su carrera, cuando esté indeciso entre Contaduría o Ingeniería (es lo que la mayoría está escogiendo en su colegio), cuando el te diga lo que quiere estudiar, pregúntale: "Mijo, no quieres ser Youtuber, Instagrammer, Linkediner, Emprendedor, Futbolista, Fotógrafo o trabajar en mi empresa?" hazle esa pregunta tu: El chico si es inteligente y te dará la respuesta, el problema es que nosotros como papitos no le hacemos esa pregunta, le decimos: ¿Que programa de pregrado vas a estudiar?