La igualdad de género es un buen negocio

La Igualdad de Género es un derecho fundamental y existe una gran deuda que saldar en la materia. Desde la perspectiva empresarial, la baja representatividad en cargos de dirección, las brechas salariales, las diferencias en acceso a capacitación, los procesos y políticas impregnados de sesgos, son algunas de las muestras claras de la deuda que existe en la materia.

El tema es tan relevante y es tan claro que es un obstáculo para el desarrollo, que fue plasmado de manera específica en el ODS 5, que busca: Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y las niñas.

Hoy voy a referirme solo al foco empresarial, y al valor que la igualdad genera en los resultados de negocio. Estudios de McKinsey Global Institute, Banco Interamericano de Desarrollo, ONU Mujeres, CEPAL, OIT, entre otros, demuestran que:

1.      Las empresas con diversidad de género en JD enfrentan menos controversias reputacionales relacionadas con la gobernanza.

2.      Empresas con mayor representación femenina obtienen: 44% más de rendimiento.

3.      Empresas donde 3 o más mujeres ejercen funciones ejecutivas registran un desempeño más alto en aspectos de la eficacia organizacional

4.      Los recursos destinados a apoyar a emprendedoras, acompañados de formación, tienen un impacto mayor en la sociedad.

 La igualdad tiene muchos retos, entre los que están: aceptación social de roles y estereotipos, limitantes relacionadas con acceso a educación y a crédito, desbalance del trabajo doméstico no remunerado, culturas organizacionales que obligan a escoger entre vida personal y laboral para crecer en una empresa, entre otros.

La brecha es grande, no tenemos consciencia de su relevancia. TODOS tenemos una responsabilidad que asumir. El cambio ha sido lento, y para acelerarlo se requiere acción inmediata y articulada.

A las empresas les recomendamos:

1. Incluir el tema como parte de la estrategia de negocios.
2. Asegurar la equidad salarial y en acceso a capacitaciones.
3. Asegurar procesos de reclutamiento libres de sesgos.
4. Garantizar una comunicación no estereotipada: interna y externa.
5. Cambiar los procesos donde puedan existir sesgos dentro de la organización.
6. Incluir en programas de capacitación espacios de sensibilización para impulsar un cambio cultural.
7. Definir mecanismo de denuncia y control de acoso o discriminación.
8. Crear las condiciones para garantizar la equidad en posiciones directivas.
9. Promover la corresponsabilidad familiar: capacitaciones y beneficios.
10. Establecer metas, medir resultados y aplicar correctivos.

 #Mujeres #Igualdad #Negocio