La importancia de aprender a medir la sostenibilidad empresarial

Actualmente es clave conocer cuáles son los indicadores que nos permiten identificar qué tan sostenibles estamos siendo en nuestras organizaciones.

Por: Felipe Ortegón Romero

Felipeortegon1983@hotmail.com

Expertos y académicos coinciden que hace más de 15 años los planes estratégicos de las más importantes compañías del país comenzaron a medir los asuntos ambientales y sociales, pero solo hasta hace poco menos de cinco años la sociedad comenzó a entender la importancia de que las empresas den ejemplo. 

Hoy en el mercado bursátil las compañías generan mayor valor a sus marcas en la medida en que logran evidenciar que tan sostenibles son, lo que repercute directamente en el comportamiento de sus acciones. Rankings como el Dow Jones Sustainability Index, entre otros, la miden con autoridad.

Lo contrario sucede cuando las empresas solo se dedican a hacer plata, sin importar el impacto que generan en el entorno. Medios de comunicación y otros grupos de interés o stakeholders, como los clientes o usuarios, son cada día más críticos, de hecho castigan malos comportamientos sociales y ambientales con dejar de comprar los productos o servicios hasta el punto de llevar a la quiebra a las compañías. Datos recientes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), señalan que las compañías que no son sostenibles tienen un 30 por ciento más riesgo de desaparecer en el corto plazo, que aquellas que entienden y aplican este valor empresarial. 

Otro indicador que permite analizar la importancia de la sostenibilidad es la imagen corporativa. Hoy las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), por ejemplo, incluyen como parte de la contabilidad la reputación. En otras palabras, un intangible como la comunicación y la comunicación cada día cobra más valor.

Otros fenómenos económicos han hecho relevante este tema son la globalización, la apertura de mercados, las Tic, la tercerización de bienes y servicios y la transnacionalización de cadenas de suministros, los cuales han derivado en dinámicas que evidencian los impactos ambientales, sociales y económicos de las compañías.

¿Qué dicen los empresarios?

Tatyana Orozco, vicepresidenta de Asuntos Corporativos de Grupo SURA, afirma que gracias a la sostenibilidad “hoy las compañías se pueden evaluar, comparar, repensarse e incluso anticiparse y responder a los cambios y necesidades de los mercados, el entorno y la sociedad”.

Según Orozco, “los inversionistas cada vez más tienen en cuenta en sus evaluaciones, más allá de los resultados económicos, la gestión y avances en temas ambientales, sociales y de buen gobierno asociados a la operación de los negocios”, señaló. 

De otra parte Bavaria, que invierte grandes recursos económicos en sus estrategias de sostenibilidad, también consideran este tema como un eje central en su operación. “Si somos parte del problema también podemos ser parte de la solución. Hemos establecido metas ambiciosas a 2025 en agua, cambio climático, energía renovable, economía circular y agricultura”, dijo Carolina García, gerente de Sostenibilidad de la compañía. 

Bavaria, reconocida por su buena reputación, afirma que el 27% de su volumen de producción se produce en cuencas en alto riesgo. “Si no abordamos este tema como prioridad estará en riesgo la continuidad del negocio. Sin agua, no hay cerveza”, afirmó.

Cinco razones para apostarle a la sostenibilidad

1.   Por consciencia, necesidad y presión social. Empresa que no trabaje en el tema, está destinada a desaparecer.

2.   Permite anticiparse para identificar y gestionar riesgos estratégicos u operativos, facilitando asegurar la continuidad del negocio.

3.   Para responder a las expectativas y exigencias de clientes, inversionistas y reguladores.

4.   Porque genera mayor visibilidad y confianza en los grupos de interés.

5.   Porque no se trata de ser rentables financieramente, también hay que ser buenos vecinos.