La mujer, caída libre en el desempleo por Covid19. Necesitamos soluciones.

Hoy voy a dar voz a miles de mujeres trabajadoras que actualmente se encuentran en paro porque esta crisis les está azotando con extrema dureza. Por suerte no es mi caso pero alguien tiene que alzar la voz. Hablo desde el lado más intimo del que puedo hablar , sustentada por datos y por emociones.

Ayer la Consejería de Educación de Murcia decidió posponer una semana más la incorporación de los niños al colegio con el fin de disponer de más tiempo para organizar la gestión interna del centro. El dato de la Encuesta de Población Activa de Julio relativo a la perdida de empleos en Murcia asciende a la escandalosa cifra del 86% de los empleos con nombre femenino. 12.700 mujeres en la Región de Murcia perdieron su trabajo entre Marzo y Junio. Que el peso de la gestión familiar recae en la mujer es una realidad y a los datos me remito. Si ante una contingencia alguien dentro de la pareja tiene que renunciar al trabajo, esa es la mujer.

Normalmente en una empresa cuando se prescinde de alguien los motivos objetivos son por productividad. ¿Qué ocurre en la empresa de la familia? Pues que además como somos las peor remuneradas por la brecha salarial. Del "empleado" del que se prescinde en la familia es la mujer que resulta más rentable en casa cuidando de los niños que trabajando. Nosotras somos las que solicitamos las reducciones de jornada para cuidar de nuestros hijos, en muchos casos optamos por figuras de auto empleo (autónomos) para poder ser dueñas y gestoras de nuestro tiempo y no rendir cuentas cuando necesitas unas horas para una gestión personal y trasladar el tiempo de trabajo a otro momento de la jornada. Ahora que dicen que el teletrabajo ha llegado para quedarse veamos a quién se le prioriza esta opción y por qué. Hay hombres que desean tele trabajar para no dejar toda la carga en los hombros de su mujer. ¿ Qué criterios han seguido en su empresa para dejar a los empleados en tele trabajo y a quién han decidido incorporar? Lo sé, el criterio ha sido priorizar a las madres y yo me pregunto ¿por qué se da por sentado que es un papel de la mujer?

Hasta que no cambiemos mentalidades es imposible que la mujer se equipare laboralmente al hombre.

Necesitamos criterios de productividad y meritocracia. Perspectiva sobre la proyección y compromiso del empleado, pero sobre todo y por encima de todo productividad. Comentando con un CEO la incorporación de un contable en su empresa me decía que necesitaba una persona que realizara un trabajo de 8 a 14 horas y yo le preguntaba de nuevo ¿por qué?. Necesitamos que la gente asuma responsabilidad y definir muy bien que se espera del empleado, cuales son las funciones de su puesto y los resultados que se desean.

Decisiones como las que se han tomado en Murcia son una debacle para la mujer trabajadora. Mujeres que no van a poder incorporarse a sus puestos de trabajo, que no van a poder reactivar su búsqueda de empleo o que van a tener su puesto pendiente de un hilo por la falta de organización y planificación de terceros ajenos a su realidad.

No voy a entrar a valorar si las medidas económicas o ayudas que ofrece el gobierno regional a la conciliación son suficientes, (por cierto, no todo en esta vida se soluciona con dinero, eso es lo fácil, lo difícil es echarle imaginación), lo qué sí sé es que no están dirigidas al público que realmente las necesita. Por desgracia hay determinadas unidades familiares que no pueden optar a la opción de contratar una persona para cuidar de sus hijos, porque si lo hacen tienen que entregar prácticamente su sueldo con lo que ya no les compensa. Hay un trabajador medio, cuya unidad familiar es la que sí puede hacer esta contribución a la sociedad contratando personas para conciliar su vida profesional, pero no pueden acceder a la ayuda porque se ha decidido que ese nivel de ingresos es elevado para la ayuda. Entonces aquellos que sí podrían hacer ese esfuerzo económico en el bolsillo familiar no tienen derecho a las medidas. Un despropósito.

Estamos en un serio brete, sanitario, económico y social pero todo esta situación se está cebando especialmente con la mujer. Es imprescindible que alcemos una voz juntas, que nos asociemos y pongamos una batería de propuestas reales para salir de esta situación laboral y familiar que está consumiendo nuestra realización y dignificación.