LA MUJER TRABAJADORA EN COLOMBIA

Por: Diana Sandoval. Especialista en gerencia de riesgos laborales, seguridad y salud en el trabajo. Soto Sandoval abogados consultores. 2018.

Hoy en día las mujeres tenemos un papel preponderante en la sociedad. Nos hemos ganado a pulso el derecho a trabajar, devengar un salario y acceder a oportunidades que antes no teníamos. Desempeñamos diferentes roles como mujeres trabajadoras con diferentes profesiones y tareas dentro de las empresas; encontramos mujeres en talento humano, ventas, diseño, finanzas, dirección, servicios generales, recepción, administración, tecnología; es decir, en cada área de cada empresa se encuentra una mujer y no solo porque seamos mayoría pues según el portal datosmacro.com, en 2016, la población femenina fue mayoritaria, con 24.708.400 mujeres, lo que supone el 50,78% del total, frente a los 23.945.019 hombres que son el 49,22%.; sino porque nuestra presencia se requiere como mujeres trabajadoras aportando equilibrio, organización y empuje en nuestros sitios de trabajo.

Las mujeres afrontamos diversos retos en el mercado laboral colombiano; en primer lugar, así como somos mayoría en población somos también mayoría en tasa de desempleo. Según el Dane, en el año 2017, para el total nacional, la tasa de desempleo para las mujeres fue 12,3%, mientras que para los hombres fue de 7,2%. Si analizamos esta cifra podemos remitirnos a diversas causales de esta panorámica nacional. Según Portafolio citando al Banco Interamericano de Desarollo (BID) y el Banco de la República, después de convocar a distintos centros de investigación colombianos e investigadores del Banco de la República, se seleccionaron ocho estudios cuyas líneas de trabajo debían explorar las diferencias de capital humano entre sexos; la provisión de bienes públicos; los sobrecostos asociados con la maternidad y productividad laboral femenina; la estructura de la familia y el esfuerzo de búsqueda; y la infraestructura, seguridad y costos de transporte. Es aquí donde un punto en específico me llama la atención porque además lo viví en carne propia, y es que tanto influyen nuestras características específicas como esposas y madres en esta desigualdad en materia de desempleo. Factores como el requerir horarios de trabajo más flexibles para podernos hacer cargo de nuestros hijos, el difícil acceso en algunas ocasiones a guarderías o jardines infantiles con horarios compatibles a los nuestros o que se encuentren cerca a nuestro hogar, el no tener quien nos recoja o nos cuide a los niños, hacen que de por si conseguir y mantener un trabajo para la mujer colombiana sea más difícil. Alguna vez conocí una empresa donde uno de los criterios para seleccionar personal era que no tuviera hijos pequeños ya que necesitaban que trabajara hasta horas de la noche sin tener excusas o no les gustaba que se pidieran permisos para citas médicas o reuniones en el colegio. Me ha pasado también que cuando voy a una entrevista me preguntan en la mayoría de ocasiones: ¿quien te cuida a tus hijos?; alguna vez hasta me dijeron abiertamente que era la candidata perfecta pero que les preocupaba que no pudiera cumplir el horario por mis hijos. Aclaro, no son todas las empresas y no son todas las mujeres, pero si esta abierta la brecha.

Afortunadamente con los retos vienen también las estrategias para afrontarlos, según humancolombia.org algunos de los requisitos para promover la equidad laboral con enfoque de género son: prevenir la discriminación e inequidades en el ámbito laboral por razones de género, reducir las brechas de desempleo por razones de sexo y la segregación laboral de género, reducir la informalidad concentrada en las mujeres, promover y fortalecer el dialogo social y generar mecanismos de vigilancia, control y seguimiento a indicadores de brechas de género en lo laboral. Como vemos hay bastante camino por recorrer, pero ya se están dando varias iniciativas del gobierno y de empresas que dentro de sus planes de responsabilidad social empresarial incluyen estas políticas; así, sembrando se empezarán a ver los cambios.

Somos mujeres, valiosas, fuertes, luchadoras incansables y trabajadoras. Somos aquellas que nos levantamos con la convicción de hacer lo mejor de cada día, de aportar lo mejor de nosotras en los diferentes ámbitos en los que nos desarrollamos. Somos líderes, damos vida, no solo las que somos madres sino las que dan vida a tantos proyectos en su día a día. Esperemos que día a día con la apertura de conciencia que se está dando alrededor del tema, la mujer tenga aún más espacio para surgir, esperemos que no sea solo hoy en este hermoso día que se recuerden tantas batallas y tantos crímenes, tanta violencia y también tantos y tan hermosos valores y logros, sino que cada día mujeres y hombres luchemos a la par para construir un mejor ambiente laboral y una mejor sociedad.