La parte humana del compliance
En el mundo del compliance, es común enfocarse en aspectos normativos, como la debida diligencia y las recomendaciones de GAFI, entre otros. Sin embargo, es fundamental reconocer que el compliance es, en su esencia, una disciplina que requiere colaboración y humildad.
El compliance no se trata solo de cumplir con las normas, sino de trabajar en conjunto con especialistas de diversas áreas para lograr un objetivo común. La verdadera fortaleza del compliance radica en su carácter colaborativo. Ningún experto puede alcanzar el éxito por sí solo; se necesita la contribución y el apoyo de un equipo diverso de profesionales.
En este contexto, la humildad se convierte en un valor crucial, incluso más importante que el conocimiento. Reconocer nuestras limitaciones y valorar las perspectivas y habilidades de los demás es lo que nos permite avanzar y superar desafíos. La humildad y la colaboración son las piedras angulares que llevan al éxito en el ámbito del compliance.