La poda del pistacho.

El pistacho, al igual que otros frutales es recomendable que tras la poda no haya fuertes heladas para que sus tejidos no sufran daño, por ello según la zona buscaremos la mejor época para reducir este riesgo.

Siempre desinfectaremos la herramienta de poda antes de usarla para evitar transmitir enfermedades. Y cortaremos las ramas dejando tacos de unos 2-3mm para tener una mejor cicatrización.

El objetivo es tener tres ramas principales en 120º a una altura desde los 0,90-1,00m al 1,20-1,30m de forma que podamos recolectar con facilidad en caso de ir a paraguas que es el medio más común.

La poda será diferente según la edad del árbol, el desarrollo y si es macho o hembra.

DEBEMOS DIFERENCIAR 3 TIPOS DE PODA:

Los primeros 4 años haremos una poda de formación, el dato de los años se ha tomado de referencia con planta que se hace la plantación ya injertada con un tamaño de más de 1 metro. Cada plantación tiene un vigor y desarrollo diferente.

• Árboles jóvenes con un ciclo vegetativo y con un tamaño inferior a 1,50m cortaremos todas las ramas y dejaremos el tallo principal a esta altura, pensando en conseguir un tallo más fuerte y la ramificación al siguiente ciclo vegetativo. Con el objetivo de tener nuestras 3 ramas principales conforme se ha indicado.
• Los que ya tienen esa altura y con ramas, limpiaremos de 90-100cm hacia abajo sin yemas ni ramas y buscaremos 3 ramas de 30-40cm en 120º con 8-12 yemas y normalmente la exterior hacia fuera para ir abriendo el árbol ya que suelen ser ramas que tienden a ser verticales.

• En el año 3 y 4 de esas tres ramas que dejamos en el primer-segundo ciclo iremos dejándoles dos cada año de forma que llegaremos aproximadamente con 24 ramas, que buscaremos estén distribuidas uniformemente por el árbol formando un vaso.
• Los machos los podaremos con cruces más altas para que predominen en la zona y la polinización sea de más efectivo, dejando cruces más altas de 1,30-1,50m.

A partir del 5º año ya haremos la poda de producción

• El objetivo de la poda de producción es facilitar la recolección, dirigiendo el crecimiento y la formación del árbol, mejorando la aireación (menos enfermedades) y la penetración de la luz solar, la haremos anual. Pretendemos por tanto mejorar el rendimiento del árbol y conseguir un fruto de mayor calidad.
• Debemos tener la precaución de no podar las ramas sobre una yema de flor, ya que perderíamos esa rama hasta la siguiente bifurcación de ramas laterales.
• La poda de los machos es muy somera y simplemente vamos quitando las ramas bajas, dejando prácticamente libre el árbol sin tocar para que predomine en la polinización.
• Nuestro objetivo es generar “brindillos” que serán donde tengamos la mayor parte de las yemas de flor y por tanto de la cosecha. Para ello pinzaremos las ramas que se van verticales del año anterior, para que la cosecha no se separe demasiado del centro del árbol, ya que el pistacho tiene bastante dominancia apical.
• Eliminar ramas interiores entrelazadas y exteriores dañadas, rotas, débiles, enfermas o secas.
• Es interesante no quitar todos los chupones y dejar las brotaciones más débiles situadas en el interior de la copa, ya que sombrean la madera que forma la estructura del pistacho y evitan se queme.
• Quitaremos las ramas más bajas, ya que son las que menos iluminación reciben y, por tanto, producen los frutos de peor calidad.

Poda de renovación:

La poda de renovación o de rejuvenecimiento del pistacho la realizaremos cuanto tengamos indicios de envejecimiento, suele pasar cuando llevamos muchos años en producción.

Empezaremos a ver hojas más pequeñas y amarillentas, empezaremos a tener menos producción y veremos pérdidas de follaje en el interior del árbol.

JAVIER MARTINEZ

CONSULTOR AGRONEGOCIO

INGENIERO AGRONOMO

jmlopez@azud.com