La primera reforma de la Izquierda

Estamos en medio de la primera reforma tributaria de izquierda en la historia del país. Reforma que en teoría mejora las condiciones a las empresas, atrae inversión extranjera y pone a tributar a los más pudientes del país.

Sin embargo, lo que tenemos que preguntarnos es ¿por qué el gobierno está recibiendo advertencias de las calificadoras sobre la reforma? ¿Es la reforma tributaria la única salida al problema de la falta de recursos para los planes sociales que están en la mente del nuevo gobierno? Las respuestas a estas dos preguntas son muy sencillas, se está apretando más a las empresas, se está complicando aún más la creación de empresas en el país, se está desincentivando el emprendimiento y se está asustando a los inversionistas extranjeros, entre muchos otros problemas que esta causando la nueva reforma y no, la reforma no es la única forma de mantener y mejorar el nivel de vida de los colombianos.

Hoy en día la economía crece a una tasa de 12.6%, más por un efecto de base estadística que por una real mayor dinámica de esta. De aquí parte de la explicación del entrante Ministro de Hacienda de que “ni siquiera nos dejaron la hoya raspada, se la llevaron”. Algo exagerado desde mi punto de vista el comentario, pero a la fecha no he conocido gobierno entrante que no diga algo similar. Este siempre es el caballito de batalla para poder establecer la necesidad de una reforma tributaria que cubra el gasto proyectado del gobierno.

Esta vez, la necesidad de mayores recursos para una reforma social y que sea “incluyente” (palabra que está de moda, antes mejor conocida como respeto y empatía por los demás) es la disculpa para que de nuevo el gobierno entrante justifique que quiere gastar más de lo que espera recaudar y la única brillante solución según Hacienda es subir los impuestos; es decir, la evasión en este país no existe o es intocable. El nuevo Director de la DIAN conoce poco del tema de la evasión y hoy en día esta contradiciendo lo que desde la academia hace 3 años defendía enfáticamente. 

En la vida real y más aun después de pandemia, muchas familias en el mundo al ver reducidos sus ingresos por efecto de la pérdida del empleo de alguno de sus aportantes debieron restringir el gasto y ajustarse a la nueva situación económica del hogar. Sin embargo, el gobierno está proponiendo aumentar los impuestos a la clase media y alta y por otro lado, reducir la renta petrolera, grabar las exportaciones de minerales combustibles y minerales preciosos; es decir desincentiva las exportaciones de productos que hoy en día ya le generan ingresos por rentas al fisco y plantea la posibilidad de aumentar sus ingresos sin tener en cuenta que se golpea al rubro más grande de exportaciones del país, rubro que al caer en su volumen, generará una caída en el recaudo y esta caída deberá ser incluida en las cuentas del recaudo esperado por la reforma.

Aunado a lo anterior se busca crear “impuestos saludables” al grabar las bebidas azucaradas, (como si los edulcorantes no hicieran daño), los alimentos ultra procesados, los plásticos de un solo uso y aumentar los impuestos a la ya maltratada clase media, que aún está buscando salir de las deudas que le dejó la pandemia 2020-2021. ES cierto que hay que mejorar la tributación de las personas naturales, pero hay que hacer un esfuerzo mayor en la evasión y no en reducir el ingreso disponible a la clase media, esto solo causará a futuro un menor crecimiento del PIB.

¿Y qué decir del impuesto a las ganancias ocasionales? Este incremento en las mismas lo considero justo hasta cierto punto, pero no es posible dejar de diferenciar lo que es una ganancia ocasional por azar de una ganancia ocasional por la venta de un bien inmueble.

En todo el mundo el patrimonio mas importante de las familias es su hogar, los inmuebles son en gran medida una renta alterna para los miembros de la tercera edad, un vehículo seguro de inversión y en muchos casos al ser vendidos los inmuebles se genera un pequeño exceso de liquidez que bien puede ser el inicio de un emprendimiento, que a futuro genere una mayor crecimiento y empleo formal en nuestra economía o unas merecidas vacaciones para la familia, en ambos casos se dinamiza la economía. Es importante que el gobierno sea más flexible en los topes que pretende fijar en lo que compete a la ganancia ocasional producto de la venta de los inmuebles en las personas naturales, esto puede tener un impacto fuerte en la evasión fiscal y causar efectos secundarios en el crecimiento económico.

El 4 x mil ni lo quiero mencionar, no hay abominación mas grande que este impuesto y va contra toda lógica en una economía que lo que debe buscar es formalizarse.

La triste realidad, es que sin la reforma tributaria el gobierno no podría mantener o aumentar el actual nivel de gasto y por esto entra a “dirigir” la atención del ciudadano de a pie justificando el aumento de impuestos dadas las mayores necesidades sociales, cuando en realidad busca liberar recursos para otras cosas. Un pequeño ejemplo:

Si recaudan nuevos impuestos por consumo al cigarrillo y estos van a la salud, digamos 500,000 millones, el gobierno podría mover esos mismos 500,000 millones del presupuesto de la salud a algún otro rubro que esté sin presupuesto en alguna de las cuentas nacionales. Es decir, nos hacer ver una realidad, pero no son claros en que dichos recursos si bien son aportados a la salud, lo que buscan es liberar recursos del presupuesto de la salud gracias a este nuevo ingreso y enviarlo a otro rubro que no necesariamente cubre esta agenda social.

Aún hay mucha ineficiencia en el estado, vehículos para empleados públicos, salarios y numero de congresistas alto, tiquetes en primera clase y un mar de oportunidades de ahorro en todo lo que tiene que ver con la inauguración de obras, porque estoy seguro de que mover un Ministro a la inauguración de una obra no cuesta solamente un tiquete.     

La mejor forma de evitar una baja en la calificación de riesgo no es subir los impuestos, es ser eficientes en el gasto y en él recaudo, este último punto clave para castigar la evasión.

Aprendan a administrar antes que subir impuestos, es necesario si pretenden demostrar que la derecha fracaso administrando este país por los últimos 50 años.

Mucha suerte al nuevo Gobierno, la van a necesitar para poder demostrar que la izquierda sí pudo hacer lo que la derecha no en lo referente a reducir la pobreza y darles un mejor futuro a las nuevas generaciones.