LA QUEJA COMO MEDIO DE SUPERVIVENCIA

LA QUEJA COMO MEDIO DE SUPERVIVENCIA

Sin importar el ambiente donde se desarrolle, pareciera que mediante su existencia nos sentimos mas seguros y resguardados del mundo, de sus criticas y posibles señalamientos. Si nos quejamos, creemos pararnos en la vereda de enfrente de eso que esta ocurriendo y que no queremos, pasando por alto la posibilidad de estar haciendo todo lo contrario.

Nada de lo que vemos afuera esta separado de nosotros, simplemente vemos proyectado aquello en lo que creemos y posteriormente creamos a traves de nuestro estado mental, como cuando vamos al cine y la película comienza a “saltar”, el problema no esta en la pantalla sino en el proyector, todo pasa por allí y desde ahí se expande ante quienes quieran ver. En ciertos momentos esto supone una obviedad, sin embargo, en el día a día tendemos a culpar a la pantalla sin darnos cuenta que la solución esta mas cerca de lo que creemos si sabemos sobre qué accionar.

Mediante la queja mostramos el valor que le damos a las situaciones o circunstancias que vamos atravesando y si ante cada situación desagradable o que no se ajusta a nuestros parámetros de aceptación utilizamos la queja para “soportarla”, es una regla sine qua non que terminaremos inmersos en un estado emocional disfuncional y con pensamientos consecuentes a la historia que nos estamos contando. Las circunstancias son solamente eso, no tienen valor por si mismas salvo a traves de nuestras interpretaciones. Una misma situación vivida por dos personas diferentes puede tratarse de una gran posibilidad o una inmensa maldición.

Lamentablemente la queja se ha convertido en un hábito de muchas personas que aún no pueden mirarse a si mismas y darse cuenta que lo único que están generando con ese comportamiento es seguir manifestando, acrecentando y fortaleciendo aquello que creen estar despreciando.

De aquí quiero desprender algunos puntos para reflexionar juntos:

– ¿Qué es lo que me frustra tanto? ¿Qué quiero que no estoy pudiendo lograr?. En general nos quejamos para poder verbalizar eso que tanto nos duele y no estamos consiguiendo.

– Si no podemos mirarnos no podremos llegar a la verdad, si seguimos mirando la pantalla no podremos encontrar la solución. Creemos estar enojados con el mundo y en realidad estamos enojados con nosotros mismos. La solución reside en contactar la fuente correcta.

– Si luego de un tiempo prolongando mantenemos la queja, ¿para qué seguimos estando en el mismo lugar?. Esta pregunta debería ser nuestro caballito de batalla ante cada situación crónica de nuestra vida y que verbalizamos "no querer vivir mas”.

– El problema no es lo que sucede afuera sino la imposibilidad de hacernos cargo de lo que nos sucede con eso que esta ocurriendo y responsabilizarnos por el papel que vamos a interpretar. El lugar de víctima es tentador, confortable y por momentos nos provee cierta seguridad aunque indefectiblemente nos conduce a un espiral profundo y desalentador, para todos. Somos seres sociales inmersos en sistemas vivos donde nuestra información vibracional y energética invade el entorno, sin excepción.

– Hacer lo que realmente sentimos, creemos y decimos que queremos es lo que nos comienza a alejar de la queja automática, habitual y nos pone en movimiento hacia un rol protagónico.

– Donde hay queja no hay acción. Donde no hay acción hay queja y justificación. Aquel que vive hablando de lo que no puede hacer se ve interrumpido permanentemente por el que ya lo esta haciendo. Esto también es una elección.

– Quejarse es una perdida de tiempo y nada mas. Por minutos puede funcionar como descarga habilitada pero permanecer en ella es estar deshonrando la capacidad como creadores de nuestra propia existencia.

No se puede estar en la queja y en la gratitud al mismo tiempo, y si hoy te estas quejando:

1- estas vivo!

2- movete! (¿qué o a quién estas esperando?)

3- no estas agradeciendo la posibilidad de aprobar el exámen del Universo para trascender a un nivel superior. Mientras no puedas verlo así, la vida seguirá intentándolo a traves de situaciones similares hasta que tomes conciencia que de ti depende todo lo que sucede a tu alrededor, porque todo ello esta dentro de tu mente y es tu total creación.

Haciéndote cargo conectas, siempre, con la fuente correcta.

Mariana

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