La rentabilidad versus la Liquidez en una empresa familiar
La rentabilidad y la liquidez son dos variables que toda empresa debe buscar maximizar y equilibrar, para un crecimiento sólido y sostenido; el no conocerlas o sentir que el negocio va bien porque alguna de ellas tiene buena performance, podría generar un problema financiero. Las empresas familiares se caracterizan por lo general de acuerdo al tamaño de ellas, que los dueños son al mismo tiempo los Gerentes Generales, muchos de los cuales no solicitan o desconocen la interpretación de sus estados financieros u otras herramientas financieras, que deberían de revisar en forma periódica.
El estado de ganancias y pérdidas otorga el nivel de rentabilidad que se obtiene en determinado periodo, la cual si es buena, da cierta tranquilidad a los accionistas, sin embargo se preguntan ¿por qué no ven en sus bolsillos esa rentabilidad? y ¿por qué se hace muy difícil pagar las cuentas?, la respuesta a estas preguntas es porque no hay liquidez; las causas de este problema, podrían ser el exceso de crédito otorgado a plazos mayores que los pagos realizados, altos volúmenes de inventarios por una búsqueda de reducción de costos por economías de escala, préstamos a accionistas para gastos personales, inversiones en activos no estratégicos y elevado endeudamiento a corto plazo para cubrir inversiones de largo plazo; en conclusión “se gasta más que los ingresos generados”, a pesar del que negocio sea rentable.
Por otro lado, puede haber una desconocida, reducida o nula rentabilidad, pero una muy buena liquidez, por el mismo giro del negocio, ocasionando un sesgo, cuyos efectos son el descontrol en los costos, se realizan gastos personales e inversiones de manera emocional, se piensa y se confunde que la liquidez es rentabilidad, en conclusión “se gasta lo que no se ha ganado”; otro aspecto importante es como miden la liquidez, que normalmente la hacen viendo el nivel en que se encuentra el “cajón” o la cuenta corriente, así saben si tiene lo suficiente para hacer frente a los acreedores, desconocen lo que es el flujo de caja, herramienta fundamental para medir la liquidez del negocio.