Las declaraciones de DDHH de América

La pionera Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre se aprobó en Bogotá el 2 de mayo de 1948. Fue el primer instrumento jurídico internacional que proclamó los derechos humanos con carácter general; meses antes de que la ONU adoptase la Declaración Universal de los Derechos Humanos [París, 1948]; y, por supuesto, dos años antes de que el Consejo de Europa acordase el «Convenio de Roma» en 1950. Aun así, el derecho americano continuó su evolución y también quiso dotarse de su propio instrumento jurídico específico: la Convención Americana sobre Derechos Humanos -o «Pacto de San José»- suscrito en la capital costarricense en 1969. Desde entonces, en otros ámbitos subregionales americanos también han apostado por contar con sus propias declaraciones, como, por ejemplo, la Carta Andina para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos (Guayaquil, 2002) o la Declaración Latinoamericana de Derechos Humanos (Ciudad de Panamá, 2009).