Liderazgo disruptivo

Existen dos corrientes en el desarrollo humano y la búsqueda de resultados (felicidad y éxito) que llaman la atención de todos nosotros, la primera es aquella que trata de “reinterpretar el pasado” es decir, busca de alguna forma identificar la raíz del “Problema” y pretende borrar, alterar o modificar los registros de la memoria para que en el presente se modifique el comportamiento o patrón deseado. La otra, pretende predecir o interpretar las tendencias o conductas para construir una ilusión del futuro. En cualquiera de las dos la mayoría de las personas invierte tiempo y dinero pero esto no les permite de verdad encontrar el estado o resultado deseado.

Ahora existe “algo”, mecanismo o técnica que simplemente trata de enfocar toda nuestra energía en lo que verdaderamente Si queremos lograr. Esto es el Liderazgo Disruptivo, es simplemente romper con todo aquello que se presente como barrera; empresarialmente es aquél liderazgo que es clave para asegurar la supervivencia de la organización, la sostenibilidad, rentabilidad y relevancia a largo plazo. Esto obliga a los líderes a salir de la caja de creencias y abrir una nueva perspectiva lejos de las limitantes que creen tener por interpretaciones del pasado o la incertidumbre del futuro; el uso de la creatividad, la imaginación y el pensamiento sutil nos permite expandir el contexto empresarial.

Los condicionamientos están en el cuerpo y en la mente; la Conciencia es Pura y Virgen.

No te identifiques con la Memoria! Úsala como un Mecanismo.

Requerimos entender la diferencia entre Reacción y Acción, una persona que reacciona es porque está regida por su periferia, se siente afectada por todo su contexto sin observar su centro y reacciona dados los eventos y emociones generadas; un ejemplo clásico es “Me aman, pues Amo”, “Me perdonan, pues perdono”. Una persona regida por su centro siempre está en acción siempre ama y sirve a los demás, es libre, es como el agua, fluye entre y a través de los obstáculos y/o barreras. Se cuenta que el Buda fue insultado en un pueblo y las personas le preguntaron si diría algo y él les contestó “Yo no reacciono, Soy Libre; si tú me insultas es tú –problema- no mío”. Si logramos transformar la Reacción en Acción crearemos ambientes amigables donde florecerá la creatividad, innovación, cooperación y por ende el desarrollo de nuevos servicios y productos. De este modo podremos lograr crecimientos orgánicos en nuestras organizaciones donde las personas decidan romper esquemas y paradigmas a favor del bien común.

Busquemos nuestro centro, pero más que buscarlo aprendamos a vivir en él.

Es una elección, es una ruptura, es una decisión, es un nuevo renacer!!!

Leopoldo Daniel Alarcón Romero

Gracias Totales!!!