¡Llegó el momento de quejarte!
Hace un tiempo conocí a alguien que me decía que frente a situaciones complejas o con las que no nos sentíamos bien “quejarse era placentero, al menos en una etapa inicial”.
Mientras ella decía esto, en mis adentros se confrontaban creencias que, por cierto, he desarrollado en el entorno del emprendimiento de lo terrible que es quejarse casi prohibido y de lo negativo de sus consecuencias.
Sin embargo, no quise quedarme con la duda porque todos hemos caído en el comportamiento de la queja una o varias veces a lo largo de la vida, en especial cuando hablamos del trabajo y en ese cuestionamiento me encontré con el psicólogo Guy Winch mi respuesta.
Porque habla sobre las quejas y de su función inicial que consiste en sacar de tus adentros la tensión que te embarga y de alguna manera al verbalizarla adormeces tu insatisfacción por un tiempo, pero claro, no termina siendo una solución a largo plazo. Por ejemplo:
Si te das cuenta en sí, el poder compartir esto con alguien te ayuda a sacarlo de ti; sin embargo, la manera en que formulas la queja es poco eficaz, porque con esta no vas a ver cambios a tu favor y muy probablemente va a mantenerse tu insatisfacción.
Y es así como puedes caer en la repetición de poner el dedo en tu herida y dejar de ser un acto de liberación, para darle paso a una acción crónica que no solo te afecta a ti sino al entorno que te rodea, generando un desgaste emocional en ambas partes.
Es por eso, que Guy plantea aprender a quejarte de manera eficaz, para que superes la etapa de catarsis o validación emocional al compartir tu queja con otros y mejor la transformes en ACCIÓN.
Ahora te estarás preguntando muy lindo todo, pero ¿Cómo hacerlo?
Pues bueno, el primer paso consiste en que escribas:
✅ ¿Qué es aquello con lo que no te sientes satisfecho?
Por ejemplo: “No puedo crecer en mi empresa”.
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✅ ¿Qué emoción te genera y de donde proviene?
Eso me hace sentir frustrada y esta emoción viene del estancamiento
✅ Finalmente, formula tu queja desde el cambio que está en tus manos y puedes realizar para luego decir cuáles serán esos primeros pasos que llevarás a cabo en pro de mitigar tu inconformidad. Por ejemplo:
Estoy dispuesta a ver alternativas de diálogo con mi jefe para ver las oportunidades que puedo tener para crecer en la empresa y si definitivamente no es posible, quiero darme la posibilidad de ver otras opciones de empleo donde pueda evolucionar y sentirme retada.
Ahora que puedes tener un poco más claro de lo que trata, HOY te propongo que hagas parte de ¡La pared del desahogo laboral!
Con una variación, vamos a convertir tu queja en una que cobre sentido, es decir, en una queja EFICAZ y así des un paso más cercano hacia una solución.
Para hacerlo solo debes dar clic👇🏼 en el cuadro a continuación y encontrarás tu pared donde de forma totalmente anónima podrás compartir tu queja eficaz siguiendo los pasos que te dejé antes.
Te cuento que quise empezar por aquí porque en este tiempo del año es cuando entras a reevaluar tu situación laboral y muchas veces todo empieza con una queja.
Así que sé este puede ser un primer paso no solo para mejorar tu relación con el trabajo, sino iniciar un 2024 desde una mirada distinta y por supuesto de mi parte te acompañaré para transitar este camino a la SatisfACCIÓN.
Nos vemos en la próxima entrega 😉
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PD: Te leeré en el muro y si se te complica al inicio la fórmula para una queja eficaz no te preocupes, allí mismo te dejaré como reinterpretarla😉🕵🏻♀️.