Lo sepas o no, las Historias entretejen la Cultura de tu Organización

Las historias son la base de toda sociedad humana. Es a través de ellas que aprendemos a pensar, crear significado, dar sentido al mundo y relacionarnos.

Sin importar el sistema social en el que participemos (equipo, organización o sociedad), las historias fungen como pequeños hilos, que al unirse, entretejen y definen nuestra identidad, nuestros valores y creencias, lo que sí y no nos pertenece, y contribuyen a preservar nuestra cohesión social y cultural.

David Snowden, Ex-Director del Instituto de Gestión del Conocimiento de IBM, quien investigó por varios años la importancia de contar historias dentro de las organizaciones, particularmente en relación a la transmisión del conocimiento tácito, afirma que "la calidad de las historias y su conformidad o no con los valores que una organización quiere transmitir, son un buen indicador de la salud general de la organización".

Dicho lo anterior, ninguna estrategia, visión, cambio o cultura prosperarán, a menos de que se identifiquen y se narren las historias correctas.

"La cultura se come a la estrategia como desayuno." –Peter Drucker

En 2018, mientras facilitaba un proceso de alineación con el Equipo Directivo de una empresa de telecomunicaciones, emergió una conversación interesante y reveladora. Llevaban un tiempo intentando que sus colaboradores innovaran en sus productos y servicios, pero sin éxito. Cuando aparentemente habían concluido el ejercicio de alineación que les había pedido, les invité a tomarse unos minutos para observar lo que habían plasmado y vieran si todo era consistente o no. Pronto se dieron cuenta de tres cosas: 1) La innovación no era parte de sus valores, y por tanto, de su cultura; 2) al hablar de innovación de forma ocasional, este valor que resultaba evidentemente esencial para ellos, era un valor irrelevante y secundario para el resto de la organización; y 3) Al ser un valor percibido como irrelevante, a nadie le preocupaba dedicar tiempo a cosechar y narrar historias que lo hicieran vivo.

El gran reto con la cultura organizacional es que la mayoría de sus elementos son abstractos y subjetivos, por lo que sin historias que ejemplifiquen y hagan vivos los principios, creencias, valores, así como el conocimiento tácito de la organización, las personas que la integran difícilmente sabrán cómo comportarse y actuar en favor de ésta.

Aunque el hecho de que los colaboradores puedan enunciar los valores de la compañía importa, no es suficiente, deben además vivirlos. En ese sentido, tu trabajo como líder debe centrarse en dos acciones fundamentales:

1. Identificar y determinar el papel que desempeñan las historias en la configuración de la cultura y en el desempeño de tu organización. Si no conoces las historias que la gente cuenta, no sabrás lo que realmente está sucediendo en ella.
2. Ser capaz de narrar historias que ilustren los principios, valores y propósito que más importan a tu organización, así como saber qué historias necesitas contar en momentos específicos.

Como líder das forma a tu equipo y organización a través de las historias que cuentas de manera intencional, estratégica y sistemática. La gran pregunta es, ¿estás contando las historias correctas?

“El mundo depende de sus narradores.” – Javier Marías

Para saber más, y aprender a cosechar y narrar historias con propósito, escríbeme a josemanuel@odisea.life

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Soy José Manuel Villalobos, Consultor en Liderazgo y Desarrollo Organizacional, y Facilitador Internacional. En los últimos 11 años me he enfocado en el diseño de estrategias de efectividad organizacional y experiencias de aprendizaje centradas en las personas, colaborando con organizaciones como Cemex, Mary Kay, Deloitte, Whirlpool, Goldcorp, Home Depot, Telefónica y Metalsa, apoyándoles en el desarrollo de sus líderes y equipos, así como en sus procesos de planeación estratégica, desarrollo de talento, emprendimiento, innovación y cambio organizacional.