LOS SISTEMAS ECONÓMICOS NO SON PERFECTOS, PERO LOS GOBERNANTES LO HACEN INJUSTOS.
Buenos días: Siempre el eterno dilema de ¿Cuál es el mejor sistema económico para un país para salir del subdesarrollo? El capitalismo o su antípoda el socialismo. En el caso de nuestro país según la historia reciente en que se retornó a la democracia "representativa" desde 1980 han pasado seis presidentes de los cuales sólo uno podría considerarse de izquierda que se vio obligado a la suscripción de una hoja de ruta y virar hacia la centro derecha. El resultado aparte es que todos son acusados de corrupción e incapacidad. Pero el asunto real es que ningún gobierno logró darle una importancia a lo fundamental por negligencia e ineficiencia y que siempre -hoy se ven los resultados en las elecciones- ha sido el caldo de cultivo para que los radicales de izquierda en este caso surgieran en movimientos de reivindicación socioeconómica y me refiero básicamente a las áreas rurales o para entenderse mejor a los más pobres. Sin duda se cuestiona al sistema, pero el sistema está manejado por humanos ávidos de poder y de asegurarse cual botín de la oportunidad. El problema del capitalismo liberal o conservador es que ha pecado en la corrupción ¡vaya novedad! y en la redistribución de la riqueza obtenida por años de crecimiento económico. Simplemente fueron ineficientes en resolver problemas estructurales entre ellos los servicios básicos: sistemas de salud y educación que hoy "gracias" a la pandemia fueron puestos al descubierto en su máxima expresión. Y la pregunta es: ¿Qué pasó con el crecimiento económico? ¿Por qué motivo la riqueza de todo un país se distribuye en forma tan escandalosamente desigual? Muchos dirían que el sistema ha fallado y que por lo tanto debe ser cambiado a su antípoda. Pero creo que la solución no es un cambio de sistema sino un cambio de personas -de mentalidad- que cumplan fielmente de lo que está escrito en la Constitución de 1993 que si bien fue dado por el dictador Fujimori en ese momento no es culpable que las autoridades no la cumplan. Otro hubiera sido el escenario frente a la pandemia global si los gobernantes del pasado hubieran cumplido sus promesas electorales de respeto y cumplimiento de los artículos sobre derechos fundamentales de la persona humana. En pocas palabras no es el sistema, son quienes manejan el sistema con un espíritu egoísta e individualista -una tara del ser humano- que los vuelve "ciegos" frente a la realidad del país. Existe por demás una falta de gestión de demás autoridades regionales, locales que aún no han asimilado que la descentralización los obliga a estar mejor preparados en gestión al asumir funciones ejecutivas. Porque si esperamos que todo lo resuelva el Presidente desde la capital. ¿Para qué descentralizamos al país? Buen día, chao